Fuerza Amarilla tuvo problemas económicos todo el año. En la próxima campaña jugará en la serie B.

Un infierno financiero esta en el horizonte

A pesar de que la LigaPro anunció firmeza en el control de los presupuestos de los equipos, los problemas económicos siguen a la orden. Uno ya descendió por deudas y otro está en capilla.

En diciembre de 2018, LigaPro inició una auditoría para saber la realidad económica de los clubes. El objetivo era determinar para cada uno el tope presupuestario, de acuerdo a los pendientes por cubrir y los ingresos seguros. Pero el primer resultado de esa auditoría fue desolador.

“El fútbol ecuatoriano estaba quebrado”, dijo Miguel Ángel Loor en abril, cuando Fuerza Amarilla empezó a sufrir las primeras suspensiones.

Allí, Loor aclaró la misión de LigaPro, a la que muchos veían como la salvadora del fútbol local. “Si equipos como Fuerza Amarilla no pueden competir por su situación económica, pues jugaremos con quienes sí puedan. Debemos depurar al fútbol ecuatoriano. Nosotros como Liga no podemos salvar a ningún club. Son los propios clubes los que deben buscar soluciones”, aclaró.

Y siete meses después esa es la realidad, con equipos suspendidos todas las semanas y otros inclusive ya perdieron puntos en mesa o fueron separados del torneo.

Barcelona: Un grande sin tranquilidad

Barcelona tiene una deuda urgente por 362.070,77 dólares. Está suspendido y debe pagar o presentar un acuerdo nuevo de pago hasta hoy a las 18:00 para ser habilitado y jugar contra Técnico Universitario.

Barcelona tiene un déficit de 29 millones de dólares. Eso equivale al 23,6 % del total del fútbol ecuatoriano (Miguel Loor dijo que el fútbol ecuatoriano debía cerca de 110 millones).

El año anterior, a Barcelona ingresaron 23,4 millones, pero salieron 26,5. Este año, las suspensiones por deuda han sido constantes.

El Nacional: Punto menos y nueva deuda

El Nacional perdió un punto por no presentar los roles de pago a tiempo. Eso lo relegó en la pelea por el último cupo para los playoffs. Aunque la directiva asegura que los jugadores están al día con sus sueldos, los errores administrativos pasados están saliendo a flote. La Asociación de Fútbol No Amateur de Pichincha usará las vías legales para cobrar 212 mil dólares que debe el cuadro criollo por impuestos municipales (puso AFNA a cambio), arriendo del Atahualpa y multas por tarjetas y más.

D. Cuenca: Desarmado en medio camino

Deportivo Cuenca también perdió un punto por no presentar los roles de pago a tiempo. Además, no jugó contra el América de Quito por una suspensión por deudas. Esas cuatro unidades le habrían ayudado a meterse en los playoffs. Además, la crisis económica provocó que ocho jugadores se vayan del plantel a mitad de año: Carlos Cuero, Anthony Bedoya, Luis Luna, Gabriel Corozo, Rubén Cangá, Abel Araujo, Marco Mosquera y Fabricio Baguí (indisciplina). El cuadro morlaco podría perder hasta su complejo.

Clan Juvenil: Con el puntaje en contra

Clan Juvenil sumó 12 puntos en la cancha, pero perdió 15 en mesa. En consecuencia, se fue de la serie B de la LigaPro con un puntaje de -3. El plantel de Sangolquí ya fue separado del torneo porque no se presentó a jugar en dos oportunidades, precisamente por suspensiones por deudas. Su situación financiera ya es insostenible y el próximo año seguirá con esas deudas porque irá a la segunda categoría, donde todavía forma parte de la estructura del fútbol profesional. El equipo tiene otros pendientes en AFNA.

F. Amarilla: Descendido y con deudas

Fuerza Amarilla perdió cinco puntos en la mesa, debido a que no presentó los roles de pago a tiempo. Además, el fin de semana anterior no se presentó al partido contra América de Quito porque no llegó a un acuerdo con sus acreedores. Su deuda total es de 300 mil dólares, pero la suspensión fue por 19 mil dólares. Ayer en la tarde el presidente del club, José Aroca, negociaba por un acuerdo de pago con los acreedores. “Sí vamos a jugar”, dijo convencido. Si no se presenta será separado del torneo.