El femicida: un hombre con baja autoestima

El femicida: un hombre con baja autoestima

Expertos describen las características que tendría un maltratador en nuestro país. En Ecuador suman 69 femicidios en 7 meses.

Un llanto desgarrador invadió la sala. Los lamentos no paraban, pero se acentuaron cuando Verónica sacó de un pequeño bolso el retrato de su madre; aquel, donde le sonreía a la vida.

Desde la noche del viernes 21 de julio, Petra María Pincay Castro ya no está con ellos. Cuatro puñaladas acabaron con sus 52 años de existencia, dentro de lo que parecía un lugar seguro: su vivienda. Lo que más estremeció a los habitantes del populoso sector Velasco Ibarra del cantón La Libertad, fue escuchar a su vecina gritar el nombre de su agresor: José Luis, su marido. A renglón seguido ver una imagen indeleble: a la vecina con un cuchillo clavado en la frente.

Como Petra María, 69 mujeres han perdido la vida en lo que va del año en manos de quienes decían “amarlas hasta que la muerte los separe”.

Y fueron precisamente ellos quienes pusieron el punto final. ¿Qué habría pasado por sus mentes para actuar de esa manera con sus parejas? ¿Existe un patrón de conducta que nos pueda describir al ‘macho, latino castigador’, en el país?

Priscila Rada, psicóloga de la Fundación Paz y Esperanza, entidad que brinda asistencia legal, psicológica y cristiana por violencia intrafamiliar, reconoce que en Ecuador no contamos con investigaciones que marquen un perfil de personas que maltratan.

No obstante, de los ‘machos castigadores’ que han atendido en el organismo, destaca ciertas características. “Generalmente, son personas con baja autoestima que lo enmascaran o tratan de encubrir mediante el control. Tienden a controlar a sus parejas de forma excesiva; y, además, no tienen lo que nosotros llamamos inteligencia emocional”, describe la experta.

Otro de los detalles que ha observado, es que a esas personas les cuesta muchísimo conectarse a nivel de sentimiento con la otra persona e, incluso, no pueden controlar ciertas emociones como por ejemplo la ira. “Eso hace que a su vez actúen de esa forma”.

A ello se suma que son personas poco autocríticas; sin embargo, critican mucho los defectos de la otra persona. “Buscan los defectos de su pareja para tratar de desestabilizarla y por otro lado minimizarlas, entonces lo que hacen es maltratarlas especialmente en el plano emocional, de tal forma que la autoestima de las mujeres queda debilitada y ellos puedan tener el control. Aparte de eso, las van aislando y de esa manera no cuentan con redes de apoyo, como la familia, amigos, con los que puedan conversar acerca de la situación o tal vez buscar ayuda”.

El psicólogo Jorge Escobar considera que se sigue validando la violencia. “No se dice que cualquier forma de violencia: niños, niñas, sino que ahora se victimiza y revictimiza solo al género femenino, cuando es la violencia como tal la que hay que empezar a detener”.

¿Y cómo detener a un maltratador?, ¿puede cambiar? Es muy difícil que lo haga y acepte ayuda, dice Rada. Cuando dicen arrepentirse de alguna situación -añade- en realidad no lo hacen y por cualquier cosa vuelven a estallar y entran en lo que es el círculo de la violencia: una aparente calma, hacen las pases con su pareja, llegan a un tiempo corto de estabilidad de la pareja y luego busca cualquier situación o excusa para volver a maltratarla.

La mujer llega a tal punto que no entiende si lo que están viviendo es una situación de abuso o de maltrato. Se le hace muy complicado pedir ayuda, lo cual puede desembocar en femicidio.

La consigna

Ningún caso quedará en impunidad

De los 69 casos de femicidio que se han registrado en el país, 43 ya fueron resueltos, 12 están en investigación y 14 con boleta en contra del responsable.

“No vamos a permitir que ningún caso de violencia de género quede en la impunidad”, dijo ayer Andrés de la Vega, viceministro del Interior, en rueda de prensa donde se informó la captura del presunto responsable de la muerte de Yadira, su exconviviente. Su cuerpo mutilado fue encontrado en varias partes del sur de Quito.

Los excesos

Las drogas, un acelerador del maltrato

Las drogas aceleran o pueden estar asociadas a la agresión y al femicidio, dice la psiquiatra Julieta Sagñay, directora de la Clínica de la Conducta.

Según explica, muchas drogas como el alcohol, la marihuana, cocaína, pueden abrir el circuito paranoide en el ser humano, “es decir, el exceso de una sustancia, de un neurotransmisor que se llama dopamina, además de aumentar la agresión puede causar un delirio celotípico, muy diferente a los celos normales”.