Imagen de archivo de una de las vigilias por los tres miembros del equipo periodístico de diario El Comercio.

Familiares de equipo periodistico lamentan que Guacho no fuera capturado vivo

Explicaron que con la muerte del disidente de las FARC desaparecen las posibilidades de acceder a la información que poseía.

Los familiares del equipo periodístico de diario El Comercio, secuestrados y asesinados en abril por el disidente de las FARC Walter Patricio Arizala, alias Guacho, abatido en Colombia, reconocieron el trabajo del país vecino pero lamentaron que no fuera capturado vivo.

“Ninguna muerte es motivo de celebración. Aunque reconocemos el trabajo realizado por las autoridades colombianas, es lamentable que quien se adjudicó el secuestro y asesinato de cinco personas haya sido abatido en lugar de que lo hayan capturado con vida”, dice un comunicado conjunto de los familiares.

Difundido poco después del anuncio del presidente colombiano Iván Duque de que sus fuerzas armadas habían conseguido matar al disidente de las FARC, los familiares explicaron que “con su fallecimiento mueren también las posibilidades de acceder a la información que poseía” sobre el secuestro y asesinato de Pául Rivas, Javier Ortega y Efraín Segarra.

“No sólo sobre lo que ocurrió con Paúl, Javier y Efraín, sino también con Óscar Villacís y Katty Velasco y sobre los vínculos entre las organizaciones narcodelictivas y la institucionalidad ecuatoriana”, destacaron.

Pero para los familiares, quienes este sábado 22 de diciembre convocaron a una rueda de prensa para exponer su postura al respecto, “este hecho de ningún modo significa que se haya hecho justicia”.

“Desde la perspectiva jurídica nosotros invitamos a las dos Fiscalías a no pensar ni empezar a enarbolar argumentos que permitan o el cierre de las investigaciones o que permitan solamente determinar a alias Guacho como el único responsable”, expresó Yadira Aguagallo, pareja de Rivas, durante la reunión con medios.

Agregó que aunque Arizala se haya adjudicado el plagio y homicidio de los tres integrantes del equipo del rotativo capitalino, “necesitamos una verdad procesal” de este caso.

Guacho, responsable entre enero y abril del asesinato de cinco civiles y cuatro militares ecuatorianos, murió el viernes 21 de diciembre en una operación de las fuerzas de seguridad colombianas en la vereda (aldea) de Peña Caraño, en la zona de Llorente, que hace parte de Tumaco, el municipio de Colombia que tiene más hectáreas sembradas de coca.