Vereda. Algunas calles lucen totalmente negras.

La falta de alcantarillado desespera a Puerto El Morro

El crecimiento de la población agudizó el problema en este sitio turístico. Las filtraciones de aguas negras ponen en riesgo la capilla. Emapag alista obra.

El agua servida corre por los bordillos de las aceras de este emblemático sitio turístico. Está en todas partes, en contraste permanente con las calles asfaltadas y adoquinadas, ahora destruidas por falta de mantenimiento.

El problema tiene doce años, desde que la población de Puerto El Morro comenzó a crecer. Ese tiempo coincide también con el que los porteños de este pueblo de pescadores piden el alcantarillado sanitario.

Las huellas de la falta de este servicio se palpan incluso en la capilla, donde existen filtraciones de agua servida. El moho se nota hasta en las paredes de ese lugar, que tendrá que ser reconstruido en su totalidad.

Así lo determina el estudio de Decibel EQ, integrado por un equipo de ingenieros que analizaron la estructura.

En el informe, al que tuvo acceso EXPRESO, se determinó que las filtraciones de agua que han provocado deterioro en columnas, paredes y pisos provienen “de las casas que rodean a la iglesia, porque las mismas no cuentan con un sistema de redes cloacales”. La capilla tiene riesgo de colapso.

Las secuelas son evidentes. Jaime Aragonés, presidente de la Junta Parroquial del puerto, explica que en la zona la problemática se acentúa mucho más que en otros lugares porque ha crecido la población, que ahora supera los 4.000 habitantes. “Como junta parroquial hemos luchado para que el alcantarillado llegue. Somos un lugar turístico”.

Hay esperanza. El líder señala, además, que hace diez días llegaron funcionarios de Emapag a hacer la consultoría, para luego de eso socializar el proyecto de la obra.

Pero esa acción no emociona a habitantes como Clara Medina, habitante del barrio Centenario. Está cansada. Le han tomado fotos a ella y a las calles, ha recibido visitas de los técnicos del Municipio, de Medio Ambiente, de la misma Junta Parroquial y de otras autoridades, pero nada.

Su desazón tiene argumentos. Aunque toda la población tiene problemas de alcantarillado, el barrio Centenario es el más deprimido. Un riachuelo contaminado, lleno de basura y aguas negras bordea sus viviendas en un tramo de tres cuadras, dibujando una vereda de heces nada agradable al olfato. Para llegar a sus casas, quienes viven allí han construido puentes de tabla.

Algunas familias han puesto tubos que van directo al riachuelo. Otros salen directamente a la calzada. También existen desfogues de otras partes que van al estero.

La solución todavía está en planes

Pedro Morales, secretario de la Comuna Ancestral del Puerto El Morro, indicó que existe un proyecto por parte del Municipio para construir el ducto cajón en el barrio Centenario y el alcantarillado sanitario, el primero no será hasta el próximo año, mientras que Interagua estaría contratando una consultoría para los estudios del alcantarillado, que inclusive ya tienen un sitio para la laguna de oxidación. Solo los estudios tardarían hasta diciembre, según el dirigente.