Exportar: El logro de los autoportistas

Exportar: El logro de los autoportistas

Es un sector golpeado, pero que se niega a caer. La industria automotriz nacional no pasa por sus mejores años. Restricciones, cupos y escasa demanda achicaron el mercado local.

Es un sector golpeado, pero que se niega a caer. La industria automotriz nacional no pasa por sus mejores años. Restricciones, cupos y escasa demanda achicaron el mercado local. Por eso, los fabricantes de piezas y partes de vehículos miraron al extranjero y comienzan a ver frutos. Aunque la oferta aún es limitada, los empresarios confían en un crecimiento diario.

Saben que tienen que ser innovadores. Raúl Minda, gerente de Logística de Road Track, y su equipo entendieron el reto y comenzaron a exportar sus sistemas de rastreo satelital. Tecnología ecuatoriana que ahora llega a Brasil.

¿Cuál fue la clave? David Molina, director ejecutivo de la Cámara de la Industria Automotriz Ecuatoriana, tiene algunas respuestas. La más importante la generación de escalas en la producción. Road Track, por ejemplo, se unió a la gigante General Motors para incluir el software. Esa alianza, explicó Minda a EXPRESO, ha dado buenos resultados.

Los representantes del sector automotor también identifican otra clave: los acuerdos internacionales. Colombia y Venezuela son los compradores natos de los autos, piezas y partes ecuatorianas. ¿La razón? Un convenio de complementación que nació en el seno de la Comunidad Andina de Naciones (CAN). Con la salida de Venezuela, el sistema se aplica sobre todo entre Bogotá y Quito.

Para que un auto colombiano entre con aranceles preferenciales a Ecuador, por ejemplo, debe tener un 34 % de componente regional. Es decir, parte de la unidad debe tener piezas ecuatorianas y colombianas. Eso abre una puerta interesante, destacó Molina.

También significa una competencia más fuerte. El productor ecuatoriano debe ser más atractivo para el ensamblador colombiano. La calidad juega un rol protagónico en esta fase.

Tecnividrio conoce ese punto a la perfección, dicen sus representantes. La empresa comienza a exportar algunos de sus vidrios curvos hacia Colombia. Van a paso lento, dicen, pero seguros.

Si bien los vidrios y los sistemas de seguridad van ganando terreno, los neumáticos y las baterías son los productos estrella del Ecuador. De los 33 millones de dólares que se exportaron, en piezas y partes, entre enero y mayo de 2016, 21 millones de dólares fueron por llantas y 5,6 millones por baterías. Dacar, con sede en Guayaquil, es experta en la materia.

Molina dice que empresas como Dacar y Bosch son líderes por el servicio garantizado. El importador sabe que cuando compra una batería ecuatoriana, resaltó, tiene varios años de un buen producto.

Continental Tire Andina es otro ejemplo de cabeza de grupo en el mercado. La empresa transnacional tiene su sede en Cuenca desde 1955 y exporta a Perú, Bolivia, Chile, Colombia y Venezuela.

Ganar esa fama no fue fácil. Los fabricantes de autopartes tienen regulaciones ecuatorianas que exigen altos estándares. Eso resulta atractivo a mercados como el brasileño y el estadounidense.

Molina destaca, sin embargo, que aunque muchas de las regulaciones ecuatorianas ayudaron a mejorar la calidad, hay otras que pueden bloquear el crecimiento empresarial. Él pide que las autoridades busquen un punto medio que no limite la producción nacional.