La agencia de calificación de riesgos Moody’s sostuvo la semana pasada que las medidas son positivas, pero pueden resultar insuficientes.

Los efectos de las medidas

Tras los anuncios económicos, el riesgo país no tuvo mayores cambios. Las dudas surgen sobre la capacidad de Moreno para sostener las reformas.

Respuestas positivas, pero también dudas. Los mercados internacionales reaccionaron ante las medidas económicas anunciadas por el presidente de la República, Lenín Moreno, la semana pasada.

El riesgo país no registró variaciones significativas durante los días pasados tras el incremento de los precios de los combustibles debido a la eliminación de los subsidios en la gasolina extra y el diésel.

El indicador, también conocido como EMBI+, fluctuó entre los 684 y 686 puntos básicos. El riesgo país es un indicador que refleja las posibilidades de una nación de cumplir, en los términos acordados, el pago de su deuda externa, ya sea al capital o sus intereses. Es elaborado por el banco estadounidense JP Morgan.

Santiago Mosquera, director de la USFQ Business School, aseguró que entre el día en que anunciaron las medidas y el día siguiente los costos no variaron, prácticamente no se movieron los niveles de rentabilidad de los bonos ecuatorianos. Cuando hay noticias consideradas positivas las tasas de interés de los papeles suelen bajar y el efecto es contrario cuando hay novedades no tan alentadoras.

“Eso sugiere que el mercado, de cierta forma, sí le dio el beneficio de la duda que anunció Moreno, a pesar de que sí sorprendió a muchos”, sostuvo Mosquera.

El catedrático de la USFQ Business School, tras conversaciones con inversionistas en el exterior (compradores de bonos), asegura que la preocupación es hasta dónde Moreno va a llevar las medidas económicas sin echar su brazo a torcer.

El 3 de octubre pasado, la multinacional británica Barclays publicó su análisis tras las medidas económicas. El informe sostiene que las acciones del Gobierno representan “un gran paso adelante” en el proceso de la reforma económica que atraviesa el país.

En una evaluación preliminar, Barclays cree que si bien faltan detalles sobre las medidas y su implementación, las acciones tienen el potencial de generar ingresos adicionales que podrían exceder el 1,6 % del Producto Interno Bruto (PIB), que las autoridades debían recaudar a través de la reforma tributaria, que se acordó en el programa del Fondo Monetario Internacional (FMI).

No obstante, la firma reconoce que los riesgos de implementación no son insignificantes, considerando que las medidas conllevan costos políticos potencialmente significativos para la administración.

Estaba previsto que el proyecto de ley económico urgente, que contiene cambios en materia tributaria, laboral, entre otros aspectos, tenía que llegar a la Asamblea el pasado viernes. Sin embargo, el documento no ha sido enviado y los diferentes actores económicos quieren saber sus detalles.