Ecuador, un paraiso para el turismo internacional

C ansados de vivir entre murallas de hierro y cemento de las confortables y atractivas ciudades, los turistas buscan ahora entrar en contacto con la naturaleza y sus espesas selvas con verdes follajes, caudalosos ríos, cascadas, árboles frondosos como los atractivos guayacanes de flores amarillas, animales salvajes y aves que con su trinar despiertan por la mañana de un nuevo día. O en las islas encantadas como las Galápagos, con playas paradisiacas y azules mares con una fauna marina única en el mundo que invita al buceo y las grandes olas a surfear y además, las deliciosa y apetitosa comida marina. Ecuador, en su pequeño territorio, conserva esta prodigiosa y bella naturaleza.

Héctor García Rivera