Economía

Sin dar nombres, la CFN denuncia la entrega de créditos irregulares

La mala cartera, el primer hallazgo de una nueva administración. Una auditoría busca  corregir el riesgo de clientes que han llevado a triplicar las provisiones

Iván Andrade y Salgado, presidente y gerente de CFN
Iván Andrade y Eduardo Salgado, ocupan desde julio pasado la presidencia y la gerencia de la CFN,Miguel Canales León / Expreso

No es la Corporación Financiera Nacional (CFN) su único problema. Hay otros que también son de relevancia: Seguros Sucre, Casa de Valores Valpacífico y Banco del Pacífico.

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Ayer Iván Andrade y Eduardo Salgado, quienes desde julio ocupan la presidencia y la gerencia de la CFN, dieron indicios de lo que se viene para corregir el esquema de entrega de créditos, con requisitos y plazos que se presume han sido poco técnicos y extremadamente flexibles en los últimos años. También dejaron entrever posibles casos de préstamos irregulares en el segundo banco más importante, el Pacífico, del que son accionistas mayoritarios.

Aunque estos no son tan alarmantes como en el caso de la CFN, es decir que no afectarían su solvencia y otros indicadores, que deben estar sanos antes de su venta. Lo que sí es seguro es que contratarán una auditoría forense para Sucre y Valpacífico, y que seguirán con los procesos judiciales que, incluso, fueron congelados por las administraciones anteriores.

Entre las prioridades de la nueva administración está restaurar la mala calidad de los más de $ 1.385 millones que tiene en cartera. Se trata de uno de los principales hallazgos anunciados por Andrade y Salgado, quienes dicen que llegarán hasta las últimas consecuencias judiciales contra los responsables del deterioro de estas entidades. ¿Quiénes? Esperan las auditorías y los hallazgos del nuevo presidente ejecutivo del Pacífico para dar nombres.

La mañana de este 5 de agosto, ambos divulgaron los principales indicadores de CFN,    y con EXPRESO ahondaron en los motivos que ponen en riesgo de su estabilidad. Hablaron de la cada vez mayor provisión que la institución debe tener para cubrir las moras de sus préstamos. Ese rubro, que en el 2018 alcanzó los $ 95 millones, cerró el 2020 en $ 318 millones. Y en lo que va de este año (solo hasta junio) ha requerido de $ 338 millones.

Esto no solo se atribuye a los desequilibrios que generó la pandemia, que hoy marcan una morosidad del 17 %, sino al sistema bajo el cual se ha venido calificando a 2.687 clientes que, hasta junio de 2021, tenía la CFN. La concentración de clientes que están en las categorías A y B (de menor riesgo) genera sospechas. Solo ahí, dice Andrade, existen 213 con un monto que alcanza los $ 684 millones en créditos. 

“La pregunta que debemos hacernos es si ese monto de clientes debe estar realmente en A, en B o en C”. La transparencia de esa cartera, señala, es la primera tarea. “Es mejor tener una dosis de verdad, y no una que esté construyendo una irrealidad. Nosotros le debemos explicar al país quién tiene el dinero, en qué clientes están. ¿La condición en el negocio en el que están va a tener el flujo de caja para pagar? ¿Va a requerir ayuda para salir?”. 

Los nuevos directivos de la entidad cuestionaron la política crediticia llevada en los últimos años por la Corporación. Para resolver eso, manifiestan que el primer paso lo están dando con un proceso de depuración de cifras que reflejará cuánto más de provisiones se necesitará.

El banco, dicen los actuales directores, ha entrado a una etapa de restauración, con el fin de ver cómo se van recuperando los recursos estatales. En cuanto a montos reestructurados, Salgado revela que la entidad registraba hasta junio $ 713 millones sometidos a alivios financieros o refinanciamientos fijados en la anterior administración.

  • SUCRE SERÁ SOMETIDA A AUDITORÍA

El proceso de liquidación de la mayor aseguradora estatal sigue un esquema que estará planteado por los lineamientos de la nueva administración de la    CFN, la principal accionista de la entidad. La orden de cierre, dictada en un decreto ejecutivo del presidente Guillermo Lasso, acabó de instruirse en una sesión del directorio celebrada a mediados de julio. En esta, dice Iván Andrade, presidente de la Corporación Financiera Nacional (CFN), se acordó nombrar a un liquidador cuyo nombre se conocerá en las próximas semanas. El primero paso de este proceso, dice, será encargar una auditoría forense. Uno de los aspectos que es necesario aclarar es el monto de reaseguros que la entidad tiene por cobrar y por pagar.

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Andrade también confirmó que Valpacífico, otra de las empresas que pertenecen a CFN, entrará en proceso de liquidación. Todavía se investiga la desaparición de $ 7 millones en bonos que custodiaba a favor de Sucre. 

  • EL PACÍFICO ESTARÁ LISTO PARA VENDERSE EN EL 2022

Para la nueva administración de CFN, este será un año de depuración. Y de ese proceso, según se anuncia, no se excluye al Banco del Pacífico, como paso previo para su venta.

La idea es transparentar y actualizar las cifras de la institución, que suma más de $ 8.000 millones en activos, sobre todo luego de un año de pandemia.

La valoración que hicieron administraciones pasadas, dicen los directivos, deberá ser revisada, pues se deben tomar en cuenta nuevos indicadores que podrían influir en su valor. Uno de ellos es la mejor condición en la que está el riesgo país.

Eduardo Salgado, gerente de CFN, anunció que la preparación para su venta se efectuará entre enero y agosto de 2022, y que para el último trimestre se espera tener ya lista su licitación pública. “Lo que buscamos es que al país arribe un grupo bancario que tenga ganas de invertir en el país, de competir y bajar las tasas de interés en el mercado”.