Desde temprano, miembros del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) y de los Bomberos buscaban -ayer- a Brayan Aguirre Acosta, de 13 años, a lo largo del río Milagro, en el cantón del mismo nombre.

El cadáver de su hermano menor, Luis Mario, de 11, fue hallado a las 06:30, mientras era arrastrado por la corriente del río, ante la angustia de sus familiares, quienes los buscaban desde la tarde del domingo.

Los niños desaparecieron luego de que se acercaran al afluente para bañarse. Al parecer, los hermanos solían ir al río luego de recolectar botellas o lavar carros. Trabajo que hacían para ayudar económicamente a su mamá.

La búsqueda comenzó esa misma tarde en los alrededores del río. La pesquisa dio su primer resultado cerca de las 19:00 cuando un tío encontró una sandalia de caucho de uno de ellos. El calzado estaba sobre una de las rocas que hay en la ribera del río y que sirven como muros de contención.

Con la llegada de la luz del día, el cuerpo de Luis Mario fue divisado por varios moradores que permanecían en los extremos del afluente ayudando a la familia. El cadáver estaba río abajo, a unos 250 metros de donde fue hallada la pantufla.

Los familiares de los hermanos creen que Brayan corrió con la misma ‘suerte’ de Luis.

(ATR)