
Los desechos inundan los parterres de Sauces
Allí, los botaderos improvisados aparecen durante el día y a diferencia de otros sectores, donde los vecinos culpan a personas de otros lados de ensuciar el parterre.
El panorama es similar a cualquier hora a lo largo de las avenidas Parra Velasco y Enrique de Grau Ruiz, principales de Sauces 3 y Sauces 9, en el norte de Guayaquil. Allí, los botaderos improvisados aparecen durante el día y a diferencia de otros sectores, donde los vecinos culpan a personas de otros lados de ensuciar el parterre, los residentes admiten que ellos son quienes abandonan la basura.
Es un acto “obligado”, dice Luis Palacios, habitante de Sauces 3, quien cada mañana saca su basura, pues a las 10:00 pasa el recolector en la avenida principal, la Parra Velasco, ya que no existe el servicio de recolección de puerta a puerta. “Vivimos en peatonales y por allí no ingresan vehículos, no hay recolectores, nos toca sacar la basura. Lo malo es que pasan los chamberos, rompen las fundas y la basura se riega”.
Lo ratifica Juan Rocha, residente de la manzana 156 desde hace 35 años. “Hay que sacar la basura a la calle principal, pero por más que dejemos las fundas bien amarradas las rompen los recicladores”.
Eso es lo que afea el sector, acota Santo Yosa, un electricista que mantiene un negocio frente al mercado de Sauces 9.
Gladys Moreno, quien vive en la ciudadela desde hace 15 años, dice que el problema no es la falta de recolección puerta a puerta, sino la mala disposición de los desechos. “Un vecino saca la basura en la dirección de su casa, un par de metros más allá otro vecino hace igual y así se va amontonando cada metro o dos metros. Eso está mal porque se ve basura por todos lados”. La mujer considera que como en el sector no ingresan los vehículos debería existir un solo punto para la colocación de los desechos.
Puerto Limpio explica a EXPRESO que realiza la recolección en base a microrrutas, mediante el sistema puerta a puerta y/o de punto fijo.
Para esto, dice, cumplen con horarios y frecuencia para la recolección y barrido de desechos sólidos no peligrosos. Además, añade que es obligación de los ciudadanos disponer los desechos para su recolección en las condiciones establecidas por la ordenanza municipal.
Es decir, colocar los desperdicios en la acera, en el frente correspondiente a su inmueble, o en lugares apropiados y accesibles para la recolección por parte del personal de la empresa.
Los desechos deben estar en fundas plásticas resistentes, recipientes impermeables debidamente cerrados y anudados, y respetando el horario y frecuencia de recolección para evitar que los desechos estén expuestos a condiciones climáticas, presencia de animales y recicladores informales que hurgan en la basura, rompen las fundas, dejando todo disperso.
Puerto Limpio enfatiza en que la ordenanza municipal prohíbe formar hacinamientos de desechos sólidos no peligrosos en parterres y en general en la vía pública, dado que al cruzar la calle ponen en riesgo sus vidas, porque el servicio que brinda la empresa recolectora es puerta a puerta o en puntos fijos.
Los otros problemas
Los vecinos de Sauces 3 consideran que la basura es el menor de los problemas en el sector. Su mayor preocupación es el consumo de drogas y los asaltos.
“Todos los días roban. Antes de carnaval ayudé a un amigo a quien le habían robado el celular”, dice preocupado Juan Rocha. El hombre coincide con otro vecino que se queja de las drogas. “La venden en el parque”, sospecha.