Río de Janeiro El tenista español David Ferrer se quejó ayer de las “condiciones extremas” del calor y la humedad con las que se disputa el Abierto de Río de Janeiro, torneo en el que derrotó a su compatriota Albert Ramos.

“Siempre con Albert los partidos son muy duros y más con este calor y con mucha humedad”, manifestó Ferrer en la conferencia de prensa posterior al partido, que acabó con parciales 4-6, 6-1 y 6-4.

El partido se jugó bajo un sol cenital, con 32 grados y una humedad del 67 %, según datos del servicio meteorológico de la Alcaldía de Río de Janeiro.

“No puedes mantener tu ritmo, estás más cansado, más sofocado, en los ‘rallies’ te cuesta recuperar, se iguala todo mucho más”, afirmó el experimentado tenista español sobre el calor. EFE