
Creditos, la via de reactivacion
Se necesita dinero. El sistema financiero privado entiende que en las zonas afectadas por el terremoto hay urgencia por recursos. Por eso, desde el 16 de abril, los bancos y las cooperativas han entregado cerca de 155 millones de dólares en créditos pa
Se necesita dinero. El sistema financiero privado entiende que en las zonas afectadas por el terremoto hay urgencia por recursos. Por eso, desde el 16 de abril, los bancos y las cooperativas han entregado cerca de 155 millones de dólares en créditos para Esmeraldas y Manabí. En esta última hay una demanda más alta.
Los integrantes de la Asociación de Bancos del Ecuador, por ejemplo, desembolsaron –entre abril, mayo y junio– 148 millones de dólares en Manabí. Manta concentra casi tres cuartas partes de esa demanda con el 71,4 %. Portoviejo tiene el 13,1 % y Chone el 4,7 %, de lo solicitado durante este año.
Según la Asociación, la demanda es menor que en el mismo periodo de 2015 pero ese fenómeno se repite en todo el país. Además del terremoto, recuerda el conjunto de bancos, hay una recesión económica.
¿A dónde van los recursos? El dato no especifica lo entregado desde el terremoto, sin embargo, muestra que, de enero a junio, solo en Manabí se otorgaron 315 millones. De ese monto, 226 millones de dólares tuvieron un destino productivo. Es decir, el 71,7 % fue a actividades comerciales.
Las entidades de la economía popular y solidaria, aunque en menor escala, también aportan con recursos para la zona cero. De abril a junio, según datos de la Corporación Nacional de Finanzas Populares y Solidarias, se entregaron 6,6 millones de dólares en Manabí. En total se solicitaron 1.959 préstamos en la provincia. El Carmen, Portoviejo, Jipijapa y Chone fueron los cantones con más operaciones crediticias (ver cuadro).
En Esmeraldas también hay necesidades de reactivación. Hasta junio se solicitaron, a cooperativas y fundaciones, 219 créditos. El monto asciende a 425.863 dólares. Quinindé fue el cantón de mayor demanda con 138 pedidos.
Según la Corporación, en las dos provincias se diseñan planes personalizados. Los plazos, en algunos casos, llegan a cinco años y hay mejores condiciones porque se trabaja con los gobiernos autónomos descentralizados de la zona.
Para garantizar la entrega de dinero, se movilizarán recursos de las instituciones populares y solidarias situadas en provincias no afectadas. La Corporación espera crear un fondo de apalancamiento de, al menos, 50 millones de dólares.
Álvaro Orellana, representante de los empresarios de Manabí, considera que las intenciones del sector financiero privado son buenas. En conversación con EXPRESO explicó que el sector público también hace su parte. Aunque más lento, por la recesión económica nacional, los bancos estatales también están trabajando “arduamente en los cantones más afectados”.
Según el vicepresidente Jorge Glas, BanEcuador y la Corporación Financiera Nacional han entregado 57,68 millones de dólares en créditos para más de 2.000 empresas y negocios afectados por el terremoto.