
El control militar por el feriado cubrio todo el pais
Las unidades militares reforzaron los patrullajes antidelincuenciales y las actividades de control de armas, municiones y explosivos, como medida de seguridad por el feriado del 24 de Mayo.
Las unidades militares reforzaron los patrullajes antidelincuenciales y las actividades de control de armas, municiones y explosivos, como medida de seguridad por el feriado del 24 de Mayo que termina hoy.
En la provincia del Guayas, los operativos rutinarios fueron ejecutados por los militares del Batallón de Infantería motorizado 15 Guayaquil en el cantón Pedro Carbo, en la vía Guayaquil-Manabí, con la revisión de los vehículos livianos, camiones y transportes interprovinciales e intercantonales de pasajeros. En ese sector norte decomisaron paquetes de diversos tipos de drogas, pipas artesanales y armas blancas, que fueron entregadas a las autoridades competentes.
En Manabí, los patrullajes los ejecutaron los uniformados del grupo de caballería mecanizada Teniente Hugo Ortiz en los cantones El Carmen y Chone. Los retenes militares se ubicaron en las carreteras, lo que implicó la revisión minuciosa de los vehículos que fueron detenidos. A los conductores les pidieron la documentación para comprobar su identidad.
Cada uno de los comandos de operaciones dispuso la movilización de los contingentes militares para las revisiones, que se extendieron en todo el país, con énfasis en las carreteras de mayor circulación por el feriado, entre ellas las vías Guayaquil-Manta, Portoviejo-Chone, Quito-Esmeraldas, Guayaquil-Santo Domingo, Quito-Lago Agrio.
El control también se aumentó en las zonas fronterizas, especialmente en las vías del norte de las provincias de Esmeraldas, Carchi y Sucumbíos, en donde se evidenció un mayor movimiento de personas.
El mar se cuidó con 6 patrulleras
Tres oficiales y 74 tripulantes, apoyados por seis lanchas patrulleras, cuatro vehículos, un cuadrón y una moto acuática, brindan seguridad en el perfil costero de la provincia del Guayas desde el viernes.
La mayor atención fue puesta en las áreas costeras de Engabao, Posorja, General Villamil (Playas) y la isla Puná, con el fin de evitar el robo de motores y otras actividades delictivas en la zona costera.
Las operaciones de control fueron dirigidas por la Dirección de Espacios Acuáticos, liderada por el capitán de navío José Marcos Vaca.