El Congreso de Argentina aprobó el martes una controvertida reforma previsional con la que busca reducir el déficit fiscal, luego de un largo debate y de violentos enfrentamientos entre manifestantes que se oponían al proyecto y la policía.

El proyecto, que ya había avanzado en el Senado, fue aprobado con 128 votos a favor, 116 en contra y 2 abstenciones, luego de arduas negociaciones políticas del Gobierno de Mauricio Macri para lograr apoyo a una norma que reduce los aumentos previstos para los trabajadores jubilados.

“La norma es inconstitucional (...) Están avanzando sobre derechos de los sectores más vulnerables de la sociedad”, dijo el diputado opositor Facundo Moyano durante su discurso en medio del debate que se extendió toda la madrugada.

Según opositores y sindicalistas, al modificar la fórmula para calcular las pensiones, se verán reducidos los aumentos previstos para los trabajadores. Actualmente, la jubilación mínima en Argentina es de 7.246 pesos, equivalente a 413 dólares.

La reforma es la primera de una serie que Macri -quien asumió en 2015 tras 12 años de gobiernos de centroizquierda- busca implementar para reducir el déficit y los costos de producción de las empresas, en un intento por atraer inversiones extranjeras que impulsen la economía.

Pero Macri, un exempresario acusado de gobernar solo para los ricos, ha sido criticado por reducir impuestos a grandes empresas. En los próximos meses podrían aprobarse cambios fiscales, laborales y del mercado de capitales.

El Gobierno, que no tiene mayoría propia en ninguna de las dos cámaras del Congreso, había intentado que se aprobara el proyecto el jueves pasado, pero la sesión debió suspenderse tras fuertes discusiones dentro de Diputados y enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad fuera del Parlamento.

Después del fracaso de la sesión de la semana pasada, el Gobierno ofreció dar un bono a muchos pensionados para paliar el menor poder adquisitivo que implicaría la nueva fórmula, en medio de la alta inflación que golpea los ingresos de los argentinos.

Pero los opositores consideraron que, al ser un pago por única vez, el bono no compensará el menor poder adquisitivo de los jubilados en el futuro.

En señal de protesta contra la norma, la central sindical CGT lanzó el lunes desde el mediodía una huelga general de 24 horas que afectó al transporte y al sector bancario, entre otros. (Editado por Javier Leira y Silene Ramírez)