Hacia una comunidad de la Asean

Me complace el hecho de que mi primera reunión con los líderes de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean) se produzca en un momento histórico: el 50.º aniversario de su fundación. En estos cincuenta años se dio una transformación total, no sólo en mi país (la República de Corea), sino en casi toda Asia. La Asean, con su labor de movilización y difusión del dinamismo económico, ha sido esencial para el éxito de la región.

Para Corea, la Asean ha sido ciertamente un amigo especial y valioso. Solo el año pasado, unos seis millones de coreanos visitaron estados miembros de la Asean, como turistas o por negocios. Aproximadamente 500 000 ciudadanos de estados miembros de la Asean viven y trabajan en Corea, y unos 300 000 coreanos viven y trabajan en países de la Asean. Esto es un ejemplo de que los vínculos de Corea con la Asean no son exclusivamente intergubernamentales. Nuestra relación se profundiza en la forma más personal posible mediante el entrecruzamiento de numerosas vidas individuales.

No es sorprendente. La declaración Asean 2025: forjar juntos el futuro, avalada por los líderes de la Asean en su 27.ª reunión cumbre de noviembre de 2015, señala que el grupo pretende ser una “comunidad centrada en la gente y orientada a la gente”, que busca construir una sociedad solidaria, participativa e inclusiva que fomente el bienestar material y espiritual de las personas.

Desde 2010, Corea y la Asean han hecho importantes avances conjuntos como socios estratégicos. Pero hasta ahora, la cooperación entre ambas partes giró en torno de la colaboración intergubernamental en temas políticos, de seguridad y económicos. Es mi deseo ayudar a promover las relaciones entre Corea y la Asean con énfasis en la “gente” de nuestros países. Mi visión es crear, en cooperación con la Asean, una “comunidad amante de la paz y centrada en la gente que beneficie a todos”. Esto puede resumirse en las “tres P”: las personas, la prosperidad y la paz.

Para hacer realidad esta visión, seguiré una “diplomacia centrada en la gente”, en la que la cooperación entre Corea y la Asean se desarrollará en un marco de respeto por la opinión pública de todos los pueblos de nuestra asociación, buscando su apoyo e invitándolos a tener una participación plena. A tal fin, y en conmemoración del 50.º aniversario de la Asean, hemos decidido que este sea el “Año del Intercambio Cultural entre Corea y la Asean”, en relación con lo cual promovemos diversos modos de intercambio cultural y personal. En septiembre pasado abrimos en la ciudad portuaria de Busan, en el sur de Corea, la Casa de la Cultura de la Asean, primer establecimiento de su tipo en un país socio interlocutor del bloque; esperamos que servirá como un centro para la realización de esta clase de intercambios entre Corea y los miembros de la Asean.

El gobierno coreano no escatimará esfuerzos en extender tales intercambios, especialmente entre los jóvenes, quienes conducirán las relaciones entre Corea y la Asean en el futuro. Trabajaremos para construir una comunidad de paz con seguridad para la gente. Esto implica que cooperaremos en los niveles bilateral y multilateral con todos los estados miembros de la Asean.