Evacuados en Khan al-Aassal, zona de Alepo bajo control rebelde.

Civiles y rebeldes inician salida de Alepo

Miles de civiles y rebeldes fueron evacuados de Alepo ayer, en el primer día de una operación que sella la victoria del régimen en la batalla por la segunda ciudad siria, tras un mes de cruenta ofensiva.

Miles de civiles y rebeldes fueron evacuados de Alepo ayer, en el primer día de una operación que sella la victoria del régimen en la batalla por la segunda ciudad siria, tras un mes de cruenta ofensiva.

El presidente Bashar al Asad declaró en un vídeo a los sirios que la “liberación” de Alepo era un “momento histórico”.

En el primer día de evacuación, tres convoyes de autobuses y ambulancias hicieron el trayecto entre el distrito de Al Amiriya, en el sur de Alepo, aún controlado en parte por los insurgentes, hacia el de Ramusa, en manos del régimen. En las dos primeras caravanas lograron salir unos 3.000 civiles, según la representante en Siria del Comité Internacional de la Cruz Roja, Marianne Gasser. En los buses la inmensa mayoría eran civiles y una pequeña parte combatientes rebeldes.

Antes de partir, algunas personas de edad lloraban, otras estaban contentas de dejar atrás el infierno y algunas dudaban en subir a los buses por miedo a ser interceptadas por las fuerzas del Gobierno. En la ventana llena de polvo de uno de los autobuses alguien había escrito: “Un día volveremos”.

El retiro llegó un mes después del inicio de la ofensiva final de las fuerzas de Al-Asad, apoyadas por la aviación rusa, milicianos del grupo libanés Hezbolá y combatientes iraníes e iraquíes, el 15 de noviembre.

“La humanidad exhala su último suspiro en Alepo”, denunciaron veinticinco oenegés en una declaración común publicada ayer en Turquía, condenando “el fracaso moral de la comunidad internacional”.