En la ciudad hay 592 ninos con trastorno de deficit de atencion
En el Instituto de Neurociencias (INC) de la Junta de Beneficencia de Guayaquil, el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es uno de los trastornos más frecuentes detectados en los niños. La patología, en un 76 % hereditaria, afecta cada vez a más infantes. En el 2014, por ejemplo, 1.879 la padecieron. En este año, en cambio, 592 nuevos casos se han detectado.
Por esta razón y a fin de capacitar al personal de salud y familiares de estos pacientes, ayer en el INC, el doctor Jaime Rosero, director del Centro para Desarrollo Infanto Juvenil de Berlín-Alemania, abordó el problema. Habló del desorden, de sus causas y síntomas.
Distraerse fácilmente, olvidarse de las cosas, ser impacientes, conflictivos o tener problemas para seguir instrucciones, terminar una tarea o controlar sus emociones -dijo- son algunos de los indicios que presentan los chicos con TDAH durante los primeros cuatro años de su vida.
A veces, claro está, el diagnóstico puede ser difícil: hay síntomas que pueden parecerse a otros problemas. “Sin embargo, si su pequeño tiene conflictos desde hace un buen tiempo en la escuela y casa, entonces pregúntele a su médico sobre el desorden, pues de seguro lo tendrá”, precisó.
¿Qué hacer? La alteración es curable. Hay un sinfín de medicamentos (ansiolíticos) y terapias que los ayudan a tranquilizarse. Las espirituales y conductuales, por ejemplo, les permitirán controlar sus impulsos, tranquilizarse.
La tolerancia y el apoyo constante, asimismo, será vital. Los problemas de autoestima y el resentimiento del rendimiento escolar son las principales consecuencias que trae consigo la patología. Así, cuando el afectado empieza a esforzarse y ve que su rendimiento no concuerda con su esfuerzo empieza a sentirse mal consigo mismo y con sus capacidades.
Por ello, concluyó, es vital que los padres y docentes sepan en qué consiste el trastorno, y actúen en consecuencia: dándoles las órdenes por partes, espacios para organizarse, mirándolos directamente a los ojos, asegurándose de que los han comprendido... DSZ
