La cabeza en Copa
Enfocarse en la Copa. La directiva de Independiente irá hoy a la Ecuafútbol con dos propuestas. La primera es jugar contra Fuerza Amarilla el viernes y la segunda es diferir ese compromiso para concentrarse en los cuartos de final de Copa. Esto, debido
Independiente del Valle vivió una pesadilla en los primeros 25 minutos de su partido contra Universidad Católica, el domingo, en el General Rumiñahui, de Sangolquí.
En ese lapso recibió tres goles. Además, su rendimiento estuvo lejos del mostrado en la Copa Libertadores. Allí ya está entre los ocho mejores.
Pablo Repetto tiene claro el motivo: desconcentración.
El entrenador uruguayo señaló que después de lo que vivieron en el torneo internacional les costó asumir el partido del torneo local también como una final.
“No le quito mérito al rival, pero sí estuvimos fuera al inicio del juego, cuando quisimos reaccionar ya teníamos tres goles en contra y un expulsado”, señaló el técnico del negriazul.
Repetto acepta que le preocupó este aspecto durante el fin de semana, pero al ver a sus jugadores con el nivel adecuado, envió a diez de los once titulares para enfrentar a los camaratas. Solo Dixon Arroyo se quedó fuera de la nómina.
De todas maneras, aprendió la lección. La parte mental es la que más reforzará en los siguientes entrenamientos. En lo físico, sostiene, está intacto.
Independiente del Valle no es el único que ha pasado por estas circunstancias. Liga de Quito ganó el título de la Libertadores 2008. Pero, en el torneo local no pudo ganar un solo partido en las últimas cuatro fechas de la primera etapa y quedó con el segundo lugar. Ese año quedó campeón Deportivo Quito. Al año siguiente el cuadro albo ganó la Sudamericana. Jugar la recta final de ese torneo le costó resignar un nuevo título local ante el Quito.
En 1990 Barcelona llegó a la final de la Libertadores y quedó segundo en la primera etapa del torneo local. En 1998, cuando jugó su otra final internacional, quedó sexto en la fase del campeonato ecuatoriano.
