Acto. Unidad Popular organizó un bingo en Guayaquil para recolectar recursos y presentar a sus candidatos.

Bingos y campeonatos son las vitrinas previas a la campana

Convocatoria. De acuerdo al artículo 85 del Código de la Democracia, la convocatoria a elecciones debe realizarse al menos 120 días antes de las votaciones.

El espacio gris de la precampaña es aprovechado de muchas maneras y bajo muchos nombres. Bingos, campeonatos de fútbol barriales, brigadas médicas, son algunas de las etiquetas a las actividades político-electorales que en estos días varios partidos y movimientos organizan con la principal finalidad de promocionar a sus precandidatos; pero no es la única razón.

El movimiento Unidad Popular, por ejemplo, organizó un bingo el pasado domingo en Guayaquil para recaudar fondos que financien la campaña electoral. Así lo reconoció Alonso López, director provincial de la organización, quien acotó que también fue una oportunidad para presentar a los eventuales postulantes a las seccionales del 24 de marzo próximo y además para integrar a la militancia. “Hay una planificación para jornadas médicas, un curso sobre el Código de Procesos, un encebollado en Playas. Partimos del hecho de recaudar recursos y también promocionar a los candidatos”.

En el caso de Centro Democrático, la presencia de sus candidatos en este tipo de eventos responde a invitaciones de la comunidad o los líderes barriales del movimiento. Jorge Vélez, director de la agrupación en Guayaquil, explica que cuando reciben estas convocatorias facilitan recursos logísticos como tarima, equipos de audio o trofeos (en el caso de campeonatos barriales) y aprovechan los espacios “para llevar el mensaje de la candidatura a la Alcaldía de Guayaquil”.

Mezclar lo social con lo político es una fórmula efectiva, siempre y cuando esté de por medio un elemento: la constancia. “Cuando un candidato empieza a hacer precampaña unos 6 a 8 meses antes de las elecciones, estas actividades no son tan efectivas como alguien que esté constantemente trabajando”, explica el consultor político Camilo Severino. Además, acota, estos espacios pueden ser muy efectivos para armar bases de datos de la ciudadanía, mantener el contacto y para próximos eventos de la campaña.

Estos actos también son observados por el Consejo Nacional Electoral. El director de la Delegación del Guayas, John Gamboa, asegura que son registrados como parte del control de gasto electoral para ser imputado si el candidato oficializa su postulación. “Donde se publicite no solo con la imagen sino donde se obsequien camisetas, plumas u otros objetos es gasto electoral y se apunta”.

Delegación pide datos a los dos entes

El director electoral del Guayas, John Gamboa, solicitó al Municipio de Guayaquil y a la Prefectura del Guayas la entrega de los spots y otros datos ante la mutua denuncia del supuesto uso de fondos públicos para la promoción de precandidatos a la Alcaldía de Guayaquil. Precisa que el CNE solo determinará si los spots son o no propaganda electoral, mas no si hay uso de fondos públicos. “Eso le compete a la Contraloría”. En el caso de ser propaganda, será cargada al monto de gasto electoral.