Durante toda la temporada, Barcelona se mostró como un club muy unido casa adentro. Con el arribo de José Francisco Cevallos, Carlos Alfaro Moreno y Juan Alfredo Cuentas llegó la tranquilidad financiera no solo para los jugadores, también para los trabaja

Barcelona y una fiesta monumental

Durante toda la temporada, Barcelona se mostró como un club muy unido casa adentro.

Terminó la temporada y el campeón ya tiene posando la nueva copa en sus vitrinas. El nuevo monarca del balompié ecuatoriano -Barcelona- fue el mejor del año, en la cancha, en los números, en todos los aspectos deportivos. El que más veces llenó su estadio, en el que solo perdió un partido, ante Emelec.

Cuando la corona llegó a sus manos hubo lágrimas de alegría por parte de unos y sonrisas infinitas por parte de otros. La mayoría disfrutó con sus familias. Padres, hijos, hermanos, todos hicieron de la noche del 10 de diciembre un festejo inolvidable para Barcelona.

Uno de los más protagonistas fue el uruguayo Jonatan Álvez, quien vivió esta vuelta olímpica con un sabor a revancha. “Cuando estaba en Liga de Quito estos ‘muertos’ (de Emelec) me dieron la vuelta en la cara y se me burlaban. Por eso ahora me estoy vengando”, dijo el charrúa, quien desfiló con su bandera patria sobre la espalda durante el festejo.

Otros que se unieron a la fiesta fueron las glorias del club como Holger Quiñónez, Fricson George, Carlos Luis Morales, entre otros. Un cierre de temporada monumental, digno del hoy rey: Barcelona.

Más novedades

El entrenador de Barcelona, Guillermo Almada, confirmó que el 3 de enero los jugadores volverán al país para pensar en la pretemporada del campeonato del 2017.

El presidente del club torero, José Francisco Cevallos, confirmó que irán por el traspaso de su hijo. “La aspiración es tenerlo acá. Esperemos que se pueda”, dijo el titular amarillo.