Una mejoría, pero la situación aún es compleja. En 2022, el desempleo en Pichincha disminuyó 2,2 puntos porcentuales y cerró el año en 8,5 %, según la Encuesta Nacional Empleo, Desempleo y Subempleo (Enemdu), elaborada por el Instituto Ecuatoriano de Estadística y Censos (INEC).

Sin embargo, el porcentaje convierte a Pichincha como la segunda provincia con más desempleados a escala nacional, únicamente superada por Esmeraldas, cuyo desempleo llegó al 9,1 % al cierre del año pasado.

Solo en Quito, el desempleo llegó al 9 % y la convierte en la ciudad con el nivel más alto de trabajadores que no encuentran una plaza laboral.

Si se mira por géneros, la mujer en Quito es la que más ha sido golpeada por el desempleo. La tasa en hombres llega a 8,3 % y en mujeres a 9,9 %, según las cifras del INEC.

Para Gabriel Recalde, director del Observatorio de Política Laboral, el desempleo en la capital es un problema estructural, más allá de la crisis agravada por la pandemia de COVID-19. Situaciones como la migración interna han hecho de Pichincha una ciudad que históricamente ha tenido un porcentaje más elevado de desempleo que otras provincias.

Si bien el porcentaje de desempleo en 2019, previo a la pandemia era elevado, 8 %, el nivel de 2022 aún es mayor 8,5 %. En ese contexto, el nuevo alcalde deberá tomar medidas para revertir las cifras.

Del otro lado, la fortaleza en Pichincha está en el empleo adecuado. La provincia tiene el 48,2 % de trabajadores en ese segmento, el segundo porcentaje más alto, únicamente superada por Galápagos.

Una persona con empleo adecuado es aquella que percibe ingresos laborales iguales o superiores al salario mínimo, trabajan igual o más de 40 horas a la semana, independientemente del deseo y disponibilidad de trabajar horas adicionales.

La mejoría en cuanto a empleo adecuado fue significativa en la provincia frente a 2021. Este subió 4,7 puntos porcentuales.

El alcalde electo, Pabel Muñoz, que asumirá el cargo en mayo de 2023, señaló que las tres prioridades que tiene que resolver su gestión son la inseguridad, el desempleo y la pobreza.

“Que la ciudad crezca más que el país para que se convierta en el motor del país”, aseguró en días pasados Muñoz.

¿Cómo está la pobreza en Quito? La pobreza por ingresos, según el INEC, llegó a 15,8 % en 2022. Es decir, casi 16 personas de cada 100 son pobres en la capital. Si se compara con otras ciudades que evalúa el INEC, Quito está entre las urbes que más pobres concentra, superada solo por Guayaquil. Cuenca o Ambato poseen mejores porcentajes.

En tanto que la pobreza extrema por ingresos, esta llegó a 5,6 % en 2022.

La informalidad también es otro asunto por resolver. Hasta antes de la pandemia, la Secretaría de Desarrollo Productivo del Municipio registraba 3.174 trabajadores autónomos con permiso para trabajar en espacios públicos, pero se calcula que existe más de 190.000 trabajadores dedicados al comercio informal en la ciudad. Esto ya era un problema desde 2015 y se agravó con la pandemia.

La situación se puede evidenciar en las calles, en donde vendedores informales, limpia vidrios, entre otros, van en aumento en las principales avenidas de la ciudad.