Editorial | España aún tiene lecciones que darnos

La forma en que el PSOE se ha atornillado al poder parece sacada de un manual redactado en algún país como Venezuela

La deriva populista y cleptocrática hispanoamericana está tomándose la política en España, país que luego de superar la dictadura franquista parecía que estaba enrumbado hacia la formalidad democrática e institucional. Los recientes escándalos del gobierno en funciones son abrumadores. La forma en que el partido gobernante, el PSOE, se ha atornillado al poder parece sacada de un manual de instrucciones redactado en algún país como Venezuela o Nicaragua. Sin embargo, España aún tiene activos democráticos que lo hacen muy distinto a los casos que se dan de este lado del Atlántico. Uno es que existen partidos de oposición y líderes, incluso uno que otro del propio PSOE, que defienden y se activan por valores como la transparencia. Y no solo los partidos de oposición llevan adelante esta tarea, sino que hay instituciones que son parte del Estado que todavía actúan con independencia. Tal es el caso de la Policía española en el más reciente escándalo del actual régimen, donde divulgó audios en los que se escucha a altos funcionarios del gobierno hablando de actos de corrupción y activando, así, los mecanismos de control del sistema judicial. España, a pesar de la crisis de valores que atraviesa, tiene mucho que enseñarnos. Como por ejemplo, la independencia de los poderes y cierto activismo político por la transparencia.