Premium

Espacios sagrados

Avatar del Catrina Tala

Entonces, me pregunto, ¿por qué seguimos fomentando la discriminación en redes sociales? No hay entradas VIP para el cielo, si es que existe, señoras y señores

Mucho se ha comentado esta semana de ciertos espacios que, aunque sean públicos, resultan inviolables en la práctica: esos espacios sagrados.

Pienso en el significado de sagrado mientras miro a mis hijos, a mi novio, a mi familia. Algo que merece respeto excepcional y no puede ser ofendido es considerado así, sagrado. Por eso es tan personal el concepto que le atribuimos a ciertos momentos y lugares.

Para mí, este espacio lleno de amor, libertad, sinceridad y protección, no puede ser ofendido.

Y aquí quiero detenerme: ¿qué ofensa constituye el tomarse fotografías en uno de los lugares públicos más bellos del país?

Lo que sé es que siempre encontramos una excusa cuando queremos disfrazar algo. Siempre encontramos las palabras para solapar la discriminación. Es mejor admitir que, en las iglesias -que para algunas personas son lugares sagrados-, prefieren no ver a las personas trans, porque son consideradas pecadoras. A estas personas no les gusta ver a nadie diferente, ni allí ni en ningún espacio. Como si no mirar a las mujeres trans, a los negros, a las personas con discapacidad, a los pobres, a los migrantes, pudiera hacer que todos desaparezcan, porque su presencia es una ofensa.

Nadie debería decirnos cómo vestir para caminar por la acera de un templo, cuando hay miles de turistas en minifalda o en camisa sin mangas, en España o en Turquía, tomándose fotografías sin ningún ánimo de ofender.

No existe un uniforme de la gente de bien, aunque quieran imponerlo. Ser gente de bien, respetuosa de la diversidad, es algo que viene de adentro. Ya estamos acostumbrados a ese discurso separatista, pero… ¿no es hora de que empecemos a ser más empáticos?

El mismísimo párroco de la Basílica del Voto Nacional dijo que en ese espacio se respetan las libertades y la Constitución y ofreció disculpas a las mujeres trans. Insistió en que la Basílica es para todos, fiel a los verdaderos postulados de su religión. Entonces, me pregunto, ¿por qué seguimos fomentando la discriminación en redes sociales? No hay entradas VIP para el cielo, si es que existe, señoras y señores.