Mensajes que lleva una sentencia

La sentencia contra Olmedo lleva un mensaje devastador para la seguridad ciudadana y para los servidores de la seguridad ciudadana. Condenarlo a 13 años de cárcel, a pagar $ 20 mil dólares... es inaceptable
La sentencia dictada por la Corte Provincial de Justicia de Chimborazo en contra del policía Santiago Olmedo ha creado malestar en los diversos estamentos de nuestra sociedad. Primero porque pone en evidencia que hay una administración de justicia que no es independiente de los poderes públicos, lo que atenta contra la vigencia de una verdadera y efectiva justicia. Tras contemplar casos en los que se pone en evidencia marcada ignorancia por parte de jueces y fiscales, hay algunos últimos casos de esta naturaleza que exigen se depongan a estos malos administradores de justicia de sus funciones. Y es menester que se creen escuelas para jueces y fiscales, funciones para las que se demanda vocación y experiencia.
La sentencia contra Olmedo lleva un mensaje devastador para la seguridad ciudadana y para los servidores de la seguridad ciudadana. Condenarlo a trece años de cárcel, a pagar 20 mil dólares por reparación integral a los parientes de los delincuentes, es inaceptable. La defensa técnica del servidor policial ha dejado constancia de que actuó en defensa de un niño atacado por dos delincuentes con un puñal, que no hubo desproporción en el uso de la fuerza, como argumenta la acusación, porque repelió el ataque de los delincuentes que lo esperaban escondidos a la vuelta de una esquina con puñales para atacarlo, como lo hicieron, razón por la que hizo uso de la legítima defensa personal. Y la sentencia no ha tomado en cuenta lo esgrimido por la defensa: Olmedo tiene una circunstancia atenuante trascendental a su favor: inmediatamente de producido el hecho, por su iniciativa, llamó a la ambulancia para que recoja a los delincuentes, sin huir. Nada de esto se toma en cuenta porque el objetivo de la sentencia es decirle a la delincuencia organizada que haga lo que a bien tenga, pues los derechos humanos en nuestro país son solo para los victimarios y no para las víctimas. La sentencia va a la Corte Nacional por el recurso de casación. Esperamos que esta sentencia solo demore lo necesario para que Olmedo pueda ser favorecido con el indulto que le concede la Constitución, conforme expresó el presidente de la República. La sociedad, por intermedio de sus organizaciones, debe dejar oír su voz de rechazo por esta insólita sentencia.