Wacanda

Este tipo de metrópoli, que resulta utópica, nos invita a repensar cómo debemos de diseñar nuestras ciudades

La ciencia ficción representada en lo que sería una ciudad muy bien diseñada en el continente africano, pone de manifiesto el paradigma de una urbe social, económica y ambientalmente sostenible, en la que se complementa esa relación de respeto entre el hombre y la naturaleza. Esta inspiración, creada en un mundo paralelo lleno de una exuberante y variada arquitectura, diversidad de usos y actividades, nos plantea que es posible convivir en armonía y desarrollo mutuo, en un ambiente de paz y respeto; una ciudad viva, próspera, densa y compacta, vibrante en cada paisaje puesto en escena, que emerge como una ecociudad inteligente que nos pretende decir que hay que replantear los ecosistemas urbanos y la forma de desarrollarnos como sociedad.

Esta nación ficticia de Marvel resulta muy inspiradora y ambiciosa. Nos mostró el verdadero respeto a la naturaleza y a la cultura, promoviendo ese vínculo de comunidad en el que el ser humano es el centro de toda actividad. Este tipo de metrópoli, que resulta utópica, nos invita a repensar cómo debemos de diseñar nuestras ciudades y fortalecer el desarrollo y la gestión urbana, basados en mejorar las condiciones de vida, los ecosistemas, la biodiversidad y nuestros hábitats urbanos.

Vicente Mera Molina