Urdesa y Albán Borja: el puente

Los habitantes de Urdesa Central, que estamos muy cerca del puente que une Urdesa Central con el centro comercial Albán Borja, no podemos ir caminando, a pesar de la corta distancia. El paso para peatones es mínimo, hay que caminar uno atrás de otro. Las barandas, que podrían brindarnos seguridad, están inmundas. No requieren pintarlas, sino limpiarlas; no lo hacen.

El Albán Borja me queda muy cerca, pero no hay un letrero que diga velocidad mínima, y los carros y motos se disputan el puente. Ante el temor de que un carro o moto pierda pista, por seguridad, evitamos caminar por él. No queda más que coger un taxi que nos lleve tan cerca.

Laura Gómez Serrano