Fiscalismo. ¿Será la solución?

Hay terribles brechas económicas como consecuencia del malgasto público, derroche, enriquecimiento ilícito y peculado que dejó la dictadura fascista del correato. El presidente Lasso ha encontrado en el fiscalismo (o cobro de impuestos) una respuesta para saldar el déficit presupuestario anual. Como un aporte a la solución de tan grave problema es acertado, de otra manera seguiría endeudando al país con organismos multilaterales de crédito FMI o BM, o con el gobierno chino, como hacía el correato. Es importante para la solución de la crisis el cumplimiento de las metas del gobierno, pero que estas recaudaciones tributarias sean para inversiones, no para amortizar deuda externa. Solo así valdrá la pena el sacrificio de los contribuyentes que ganan entre $ 2.500 y 3.500 mensuales. Uno de los más graves problemas es el contribuyente; los ecuatorianos no tenemos cultura tributaria, a lo que se suma la desconfianza con el dinero recaudado y la poca cobertura social, lo que genera protestas en la clase media, que será la más afectada. Pero había la necesidad de dar ese paso. Somos malos ecuatorianos, solicitamos a los gobiernos que resuelva todos los problemas sociales (carreteras, puentes, agua, salud, educación, transporte, crédito, trabajo, vivienda, etc.), pero no queremos pagar impuestos. En el primer mundo, lo que más pagan los ciudadanos son los impuestos; están conscientes de que con esas recaudaciones propician el progreso y desarrollo de su país.

Dr. Franklin Salazar Savinovich