¿Cuál de las dos opciones presidenciales promulgan cambios para transformar el país?
Discernir en torno a los aspectos citados da luces suficientes para una buena toma de decisión
Nunca podremos volver a como éramos antes. Las costumbres y formas de participación política que del pasado ya no funcionan bien. La tecnología ha hecho que todo sea ahora mucho más rápido y multidireccional. Y en consecuencia, nuestro marco legal y aparato institucional están operando fuera de los límites de la sostenibilidad. Si no se hacen pronto los cambios necesarios, nuestra democracia, sistema político y toda nuestra sociedad pueden colapsar. Para transformar el país y que pueda enfrentar los próximos 30 años, estando a las puertas de una segunda vuelta electoral quisiera sugerir ciertos aspectos que deberíamos tener en cuenta los electores.
En primer lugar, votar por el fortalecimiento de las instituciones para que puedan generar mayor confianza y resistir el desgobierno al que hemos sido sometido por más de cuatro décadas. Segundo, votar por promover una educación en valores éticos que permita eliminar la corrupción e impunidad de nuestra sociedad. Para fortalecer las instituciones la prioridad es que puedan funcionar generando un nivel de confianza muy por encima del que tenemos ahora. Un primer paso sería empoderar las instituciones de seguridad para enfrentar a la delincuencia común y organizada para combatir el caos y hacer cumplir la ley. Hay que castigar a los que roban, asesinan, secuestran y extorsionan.
La educación en valores éticos es la vía más efectiva para enfrentar la corrupción y tener mejores ciudadanos. Los niños y jóvenes de este país no tienen culpa del lío en que nos encontramos por el alto grado de corrupción e impunidad que impera, y seguro heredarán problemas y dificultades. Frente a esta realidad sombría y cúmulo de evidencias que el país vive y que no nos permite regresar a nuestra normalidad, la pregunta ‘del millón’ es saber cuál de las dos opciones presidenciales de ganar las elecciones promulgaría los cambios urgentes que requiere la nación. Vivimos en tiempo de confusión, pero estos momentos son oportunos para reflexionar, construir patria y elegir bien. Discernir en torno a los aspectos citados da luces suficientes para una buena toma de decisión. ¡Que triunfe el Ecuador y su gente!
Mario Vargas Ochoa