Cartas de lectores | Reconstruir Cuba para todos
Fidel Castro vivió lo suficiente como para ser testigo del fracaso de su revolución
Llevamos una herida de 65 años de fusilamientos, cárceles, exilio y persecuciones.
Fidel Castro vivió lo suficiente como para ser testigo del fracaso de su revolución y objeto del rotundo rechazo de todo un pueblo esclavizado.
En la muerte, el infierno se le ha puesto más caliente porque murió sin cumplir sus falsas promesas y sin ver realizadas sus alucinaciones.
Lo que nos queda a quienes lleguemos con vida a ver la liberación de la patria es la generosidad de reconstruir -para todos los cubanos sin excepción- una nación como la soñó nuestro apóstol José Martí: “Con todos y para el bien de todos”.
Alfredo Cepero