Cartas de lectores | Narcojuicio
La fiscal demostrará que la entidad acusó con apego a las leyes e independencia
Además de las facultades constitucionales y legales que tienen los asambleístas para fiscalizar, deberían demostrar competencias para identificar hechos importantes que, como resultado de su juzgamiento objetivo e independiente, genere lecciones para mejorar la gestión pública. Sin embargo, respaldados en su facultad fiscalizadora, han dirigido sus acciones de control a los funcionarios para atacarlos sin evidencias suficientes que demuestren cometimiento de infracciones. La fiscalización ha evidenciado su afán de promover la impunidad y premiar la corrupción, como ocurrió con los dos exvocales del Consejo de la Judicatura, demostrando falta de respeto a la ciudadanía y principalmente, su alineación con la delincuencia organizada, cuyos personajes salieron triunfantes por el respaldo político de quienes aplaudieron sus fechorías. Con ese nivel de fiscalizadores, el narcojuicio, cuya denominación aplaudo, será escenario propicio para que nuevamente sea pública la estupidez de los interpelantes, a quienes solo les interesa desprestigiar ante la ciudadanía menos informada las acusaciones de Fiscalía por las que están prófugos o presos sus patrones o secuaces. La fiscal demostrará que la entidad acusó con apego a las leyes e independencia cuando contó con evidencias suficientes, y se comprometerá a evidenciar los casos en proceso de investigación antes de emitir objetivamente sus dictámenes. Sin evidencias, no es responsable que Fiscalía emita dictámenes, aunque personas relacionadas con los hechos así lo requieran.
Mario Andrade Trujillo