Tras varios meses del estreno de su película, Sonido de libertad, y haciendo referencia al gravísimo problema que expone esta cinta, Eduardo Verástegui recalca la necesidad inminente de proteger a los niños y adolescentes en todas las esferas de la vida de las comunidades. Ello abarca la economía, la política, la religión, la educación y la comunicación.

Le da especial trascendencia al hecho de que los menores se encuentran altamente expuestos y son muy vulnerables, por lo que todos quienes componemos la sociedad estamos llamados a garantizar su bienestar.

También alertó sobre la presencia de fuerzas que buscan ‘normalizar’ el abuso sexual infantil. Por eso hace un permanente un llamado a la acción para que líderes políticos y sociales se embarquen en la tarea impostergable de luchar contra este terrible problema.

Que una vez que pase el tiempo no se olviden los horrores que expuso la película.

Delia Franco