Cartas: Jorge Delgado Panchana, contra destrucción de piscinas del Forestal
La natación es uno de los deportes más completos; muchas vidas se han salvado gracias a saber nadar
Estuve presente en el Mundial de Natación de 1982. Nos sentimos orgullosos de ser anfitriones. En una de las piscinas disfrutamos de ballet acuático. Se construyeron piscinas que luego fueron abandonadas. Tengo entendido que Pierina Correa Delgado era responsable del mantenimiento. El medallista olímpico Jorge Delgado Panchana escribió el 23 de febrero de 2020 en un diario de Guayaquil: “Si hay que protestar en las calles, se hará”. Como lectora de Diario EXPRESO, que investiga, confío en que sacarán a la luz el reclamo de Jorge Delgado, que no fue atendido. Él regresó triunfante de la natación y alquiló una piscina en Urdesa Central, donde mis tres hijos fueron sus alumnos. Escribo en nombre de ellos y de todos los niños que participaron en concursos en la piscina Olímpica. La natación es uno de los deportes más completos; muchas vidas se han salvado gracias a saber nadar. Jorge Delgado sostiene que hay que conservar las piscinas del Forestal, legado del Mundial de 1982. Coincido con él: la natación es clave para enfrentar los problemas de la juventud ecuatoriana. Debe elaborarse un proyecto para convertirlas en un escenario deportivo útil. Incluso podría instalarse allí un Museo de la Natación Ecuatoriana, como en Nueva York. La piscina Olímpica puede ser un patrimonio de la ciudad, conmemorando a quienes dieron glorias al país, como los Cuatro Mosqueteros del Guayas, campeones sudamericanos en 1938. ¿No es lógico decir que Guayas perdió su condición de potencia deportiva al demolerse varios escenarios y abandonar otros? Menciono palabras de Jorge Delgado: ¿Por qué se ha puesto de moda en Guayaquil demoler escenarios o no darles mantenimiento, como las piscinas del Centro Cívico?. Es evidente la falta de cultura deportiva. Todo gira en torno al fútbol, cuando los mayores logros han venido de disciplinas individuales como natación, atletismo, pesas o judo, aunque no reciban la misma atención. Pretender desaparecer este complejo es restarle importancia a un legado. Sería como quitarle las pirámides a Egipto. Estas piscinas son parte de la historia guayaquileña. Usted dijo que en la antigua piscina municipal debía funcionar la FENA, pero la pileta de Malecón y Loja ya fue demolida. Esa fue la primera piscina del Ecuador (1929), un edificio patrimonial. Confío en que Diario EXPRESO publicará esta carta y una entrevista al medallista olímpico Jorge Delgado Panchana.
Laura Esther Gómez Serrano