Cartas de lectores | ¡Se salvó la patria!

Ese resultado no es mérito de ningún partido ni dirigente, sino de un pueblo engañado

Solo hay dos cosas infinitas: el universo y la estupidez humana; y no estoy seguro de que lo sea el universo. Einstein duda de la infinitud del universo, no de la estupidez humana. Un ejemplo palpable es el festejo y baile de los asambleístas correístas por el 60 % con que ganó el No. Ese resultado no es mérito de ningún partido ni dirigente, sino de un pueblo engañado. Ganó la estupidez de un país sin protección contra la narcodelincuencia; si te matan o vacunan será gracias a la victoria del No, con exceso de asambleístas y despilfarro de dinero de campaña en gastos personales. Pero se salvó la patria del expresidente Correa, a quien el pueblo acaba de enterrar políticamente. Sin Constituyente, Correa no podrá limpiar su título en Carondelet de ‘delincuente y prófugo’. Ese chance desapareció por obra de sus propios seguidores que celebraron el ‘triunfo’. “El arte de vencer se aprende en las derrotas”, dijo Bolívar, pero estos sumisos confunden derrota con triunfo. Muchos de ellos, tildados por el mismo Correa de “tibios”, no aprenden. Tampoco tienen candidatos para las próximas elecciones seccionales: ni Aguiñaga, ni Álvarez, ni Pabel, ni Pabón, ni Lloret sirven, peor Luisa. La estupidez de Luisa González lo evidencia: dijo que votaría No en la cuarta pregunta, pero que si ganaba el Sí, sería candidata constituyente para salvar al “Señor de arriba”, sin lógica alguna, pero obediente. Ella y Correa siguen creyendo que Maduro es un gran demócrata; gran estupidez. El ignorante, próximo a revolcarse en la corrupción, termina en las tinieblas de la servidumbre (Simón Bolívar).

Por otro lado, el presidente Noboa no ganó algo que era lógico, por cometer los mismos errores de Correa, gracias a sus asesores correístas: Fausto Jarrín, Carolina Jaramillo y Michele Sensi-Contugi. Un presidente que no conozca el caso Galamedios SAS de Luis Alvarado Campi -cuyo gerente es Víctor Guivernau Escobedo, suegro de Mishel Mancheno, segunda vicepresidenta de la Asamblea- y que no mencione nada del caso Porsche, insulta al pueblo. Tener periodistas como ‘Pite y pase’ y ‘Cuarto Aparte’ que le canten sus errores es un lujo, no prensa corrupta. No vemos el mundo como es, sino como somos. Podemos estar errados también: quien nunca se ha equivocado es porque nunca ha intentado nada nuevo. La patria, señor presidente, está en sus manos y en las de buenos ministros, pero honrados, no tipo Lama, Rosero o Manzano.

José Mayorga Barona