Carta de una ciudadana a la Alcaldía de Guayaquil

Conocí parte de la administración del Ing. León Febres-Cordero cuando Guayaquil estaba en estado calamitoso, casi igual que con la actual administración municipal. El trabajo titánico que desarrolló LFC quedó grabado en nuestra familia, tanto que ya pensamos en el siguiente burgomaestre, del cual deseamos, necesitamos, que llegue a poner orden al Palacio Municipal y a la ciudad toda.

Nos sentiremos servidos únicamente cuando ese nuevo administrador se ocupe de:

Tapar los continuos huecos de las calles, avenidas y de la autopista.

Desarrolle o al menos deje iniciadas megaobras de viabilidad, que tanto necesita el tránsito caótico de esta ciudad.

Rescate los parques, tan venidos a menos e inseguros.

Se vuelva a brindar ornato a los parterres de las avenidas y en especial de la Autopista Terminal Terrestre Pascuales, por la cual pasamos todos los días, y que siempre están sucios y llenos de maleza; al parecer ya el Departamento de Jardinería no existe.

Nos sentiremos servidos como ciudadanos solo con que el nuevo alcalde de Guayaquil no sea farandulero sino que se ponga a trabajar por una ciudad altamente demandante, ya que la actual administración municipal es, por decir lo menos, decepcionante.

Verónica Zambrano Alcívar