Cartas de lectores

La “buena muerte”

“Me cuesta admitir que la manera de ser compasivo es acabar con su vida”, dijo un experto en cuidados paliativos

Un autor fue testigo en Lourdes de una curación milagrosa. Pero lo que le produjo profunda impresión fueron los enfermos que se iban de allí sin estar curados. Se podría suponer que se iban con una gran decepción, pero no; la curación milagrosa de algunos les hacía entender que el sufrimiento que padecían no era un destino fatal: “Si Dios puede curarnos, un motivo debe tener para no hacerlo”; es decir ¡un sentido!, y aquello consuela. Cuando hablan de eutanasia le dicen la “buena muerte”, esta es estar rodeado de los tuyos, en tu casa, agarrado a una mano. “Me cuesta admitir que la manera de ser compasivo es acabar con su vida”, dijo un experto en cuidados paliativos.

Mario Monteverde Rodríguez