La casa amarilla vivirá un 2022 especial, desde recibir, por tercera vez en su historia, una final de Copa Libertadores de América, rearmar una plantilla de la que se van varios futbolistas y volver a pelear por el título local. Al mismo tiempo, clasificar a la fase de grupos del torneo internacional

EL MONUMENTAL, ANTE UNA NUEVA NOCHE HISTÓRICA

En mayo de este año, la Conmebol y su comisión directiva eligieron el estadio Monumental Banco Pichincha para que sea el escenario que acogerá la final única de la Copa Libertadores de América de la temporada 2022.

El Coloso del Salado venció en la puja a varios estadios que estaban peleando por acoger la finalísima del torneo más prestigioso de Sudamérica. En la lista de opciones aparecían La Bombonera de Buenos Aires, el Centenario de Montevideo o el Morumbí de Sao Paulo.

El estadio de Barcelona Sporting Club recibirá a dos hinchadas, de los dos equipos que pelearán el título, el próximo 29 de octubre, y así albergará su tercera final de Copa Libertadores: la primera fue en 1990 al medir al Olimpia de Paraguay, luego en 1998 al enfrentar a Vasco da Gama de Brasil y ahora la que se vivirá en el 2022.

Luego de ser semifinalistas en la edición de esta temporada 2021, en la dirigencia amarilla tienen la ilusión de no solo ser anfitriones de la fiesta, sino intentar llegar a competir por el cetro continental.

TERCERA TEMPORADA DE UNA DIRIGENCIA QUE INTENTA AJUSTARSE EL CINTURÓN

Carlos Alejandro Alfaro Moreno, presidente de Barcelona, ha sostenido una bandera desde su llegada a la silla grande: el campeonato financiero.

Barcelona ha intentado fichar de acuerdo a su realidad económica y en el primer año salió campeón nacional y logró sobrevivir a la fase previa de la Copa Libertadores hasta quedar fuera en los grupos del torneo.

Si bien en esta temporada no hay un título que celebrar en la mesa, es el año en el que más ingresos pudo sumar Barcelona para sus arcas.

Llegar a la semifinal de la Copa Libertadores le representó un total de $7´550.000,00 para diferentes necesidades del equipo torero, entre esas deudas como la de los exjugadores del Ídolo: Ariel Nahuelpán o de Jonathan Álvez. Y para el 2022 se deberá pagar a Michael Arroyo.

Le restan dos temporadas a Alfaro Moreno y su equipo para seguir escribiendo historia en Barcelona, ya que el principal de los canarios ha reconocido que luego de su mandato dejará su tarea de presidente, pero hasta eso ha sido claro: “Barcelona no puede comprar ningún jugador en 900, 800, 700, 600, 500, 400 mil dólares”.

FICHAJES TOREROS: ENTRE REGRESOS Y PROYECCIONES

El 2022 será un año particular para la fanaticada amarilla. Barcelona dejará de tener en sus filas al número 18, a su capitán y emblema por muchos años: Matías Oyola, quien terminó su vínculo con el club y buscará un nuevo destino con el Guayaquil City.

Pero paralelo a su adiós aparece el regreso desde México de Erick Castillo, a la de Cristian Penilla, quien jugó en la campaña pasada en Deportivo Cuenca y Tito Valencia, quien hizo una gran temporada en 9 de Octubre.

Los toreros han blindado su plantilla con varias renovaciones como la de Pedro Pablo Velasco, Gabriel Cortez, Joshue Quiñónez, Michael Carcelén, Víctor Mendoza y Jonathan Perlaza.

Faltan más refuerzos por confirmas y sumado a estos, varios futbolistas de las formativas ya son parte de la pretemporada, que inició el pasado 27 de diciembre, buscando proyectar talentos y así ir alimentando la plantilla para el futuro.

BUSTOS, SIN MARGEN DE ERROR DESDE COPA LIBERTADORES

Aunque las finales del torneo ecuatoriano se disputan en diciembre, para Fabián Bustos la Fase 1 de la Copa Libertadores será una final para él.

La dirigencia de Barcelona le renovó el contrato por una temporada más, pero en el camino existieron dichos de las propias cabezas del club que no dejaban bien parado al argentino-ecuatoriano, sobre todo, recriminando el estilo de juego de su equipo.

Para sostenerse en el club, Bustos tuvo que aceptar el adiós de su mano derecha Rolando Azas, quien dijo en este mes que se enteró de todo durante sus vacaciones y que la noticia lo tomó de sorpresa.

Pero lejos de que su cuerpo técnico se vio trastocado y que, hoy más que nunca, está en la mira de todo el barcelonismo, Bustos deberá reformar una defensa que ya no cuenta con William Riveros, Luis Fernando León, Mario Pineida y, probablemente, Byron Castillo.

Hoy los movimientos de Bustos se miran con lupa y todo apunta que si el coche no anda, el conductor podría quedarse en el camino. El DT canario jugará finales desde enero.