Nació en Grecia y ha sabido llevar la bandera de su país en un campo dominado por norteamericanos, algo que a Giannis Antetokounmpo parece haberse puesto como meta. La noche del domingo pasado, el jugador de los Bucks de Milwaukee, de 26 años, dio otra muestra de estar decidido a no respetar ninguna “regla” preestablecida en la NBA al consagrarse como el Jugador Más Valioso (MVP, por sus siglas en inglés) del All Star Game.

Anteto, como también lo conocen, se convirtió con el título en el primer no estadounidense que logra la máxima distinción en el evento de estrellas.

En apenas 19 minutos, Giannis aportó 35 puntos, siete rebotes, tres asistencias, una recuperación de balón y un tapón que lo consagraron como líder indiscutible del Team LeBron, que ganó por 170-150 al Team Kevin Durant en la 70 edición del Partido de las Estrellas.

El jugador supo combinar la diversión propia de este tipo de partidos con una demostración de su poderío físico, versatilidad y eficacia, ya que además tuvo el mérito añadido de no fallar ninguno de los 16 tiros de campo que efectuó, incluidos tres triples.

En la historia del All Star, ningún jugador que hubiera lanzado más de 10 tiros de campo había conseguido anotarlos todos. De ahí que si bien en algún momento Antetokounmpo planeó la duda sobre quién iba a recaer el premio al MVP, ya que Stephen Curry también brilló, con 28 puntos, y Lillard, quien sumó 32 puntos y un triple muy lejano, como acostumbra, cerró el marcador, no tuvo al final rival.

La estrella LeBron James apenas jugó 13 minutos y aportó cuatro puntos con cuatro asistencias, el dominio de su equipo, dirigido por el entrenador Quin Snyder, del Jazz de Utah, que a la larga consiguió ganar tres de los cuatro períodos, incluido el segundo cuando anotaron 60 puntos en el global.

El triunfo permitió a James tener marca perfecta de 5-0 en los Partidos de las Estrellas en los que ha sido capitán del equipo.

Mientras que el veterano base Chris Paul, de los Suns de Phoenix, se encargó de dirigir el ataque del Team LeBron al repartir 16 asistencias con ocho rebotes y seis puntos.

Entre otras novedades, el base esloveno Luka Doncic, de los Mavericks de Dallas, se convirtió en el jugador que más tiempo estuvo en la pista del State Farm Arena, de Atlanta, donde se disputó el partido, sin espectadores.

El exjugador del Real Madrid aportó ocho puntos tras anotar 3 de 7 tiros de campo, incluidos dos triples de seis intentos, capturó tres rebotes defensivos y repartió ocho asistencias.

Mientras que en el Team Durant, del alero de los Brooklyn Nets, Kevin Durant, quien fue baja por lesión, fue dirigido por el entrenador Doc Rivers, de los Sixers de Filadelfia. Ellos tuvieron como mejor encestador al escolta Bradley Beal, de los Wizards de Washington, al conseguir 26 puntos, incluidos seis triples de 12 intentos.

Al final los verdaderos ganadores del partido fueron los históricos colegios y universidades negros (HBCU) para quienes se recaudó fondos que hasta el cierre de la edición eran millones.

EL DETALLE

Benéfico. El partido generó 3 millones en donaciones para HBCU, el organismo para el que se trabajó los fondos, según la NBA.