Los viajes de Rivadeneira estan en entredicho
Así es cualquier estado del Golfo Pérsico. Gabriela Rivadeneira, presidenta de la Asamblea, viajó hasta Abu Dabi, uno de los siete estados de Emiratos Árabes Unidos (EAU).
Un destino exótico para los latinoamericanos. Así es cualquier estado del Golfo Pérsico. Gabriela Rivadeneira, presidenta de la Asamblea, viajó hasta Abu Dabi, uno de los siete estados de Emiratos Árabes Unidos (EAU).
Ese periplo, que la obligó a cruzar medio mundo, ha sido criticado por la oposición por dos razones. La primera porque no es tiempo de derrochar los recursos del erario público en tiempos de crisis económica. La segunda porque los resultados de las participaciones internacionales de la titular del Legislativo son “nulos o mínimos”, dijo a EXPRESO Wilson Chicaiza, de CREO.
En esa monarquía de Oriente Medio la titular del Legislativo asistió a la Cumbre de Presidentas del Parlamentos, del 12 al 13 de diciembre. Allá habló sobre la cuota de mujeres en la función Legislativa, que pasó del 8 % a un 42 %, reseñó la Asamblea.
Esa cumbre construirá, dice la información oficial, una agenda común parlamentaria para la promoción de la participación igualitaria de las mujeres, así como su acceso a espacios de decisiones.
Para Paco Fierro, legislador de Sociedad Patriótica, el viaje no es oportuno ni pertinente. “Son gastos infructuosos, más aún a un país tan lejano y sin ninguna relación con nosotros”, dijo a EXPRESO.
Abu Dabi no ha sido el primer destino poco convencional de la titular del Legislativo. En abril, Rivadeneira estuvo en Minsk, capital de Belarús, antes Unión de Repúblicas Soviéticas.
Según Estados Unidos, ese país vive en dictadura y tiene un Gobierno autoritario.
Allí, Rivadeneira mantuvo un encuentro con Vladimir Andréichenko, presidente de la Cámara de Representantes de la Asamblea.
¿Para qué se desplazó hacia esa nación? La información oficial subrayó que el tema central fue la inversión actual y potencial en Ecuador. También la cooperación interparlamentaria, educativa y de tecnificación y transferencia tecnológica agrícola.
Además pasó por Moscú y San Petersburgo, en Rusia.
Para Diego Vintimilla, legislador de la coalición Comunista-PAIS, “es pertinente que ella participe en esos viajes. Son compromisos internacionales que forman parte de la actividad parlamentaria”, opinó.
Sin embargo, Abelardo Posso, analista internacional y exdiplomático de carrera, cree que los viajes de la presidenta a estos destinos han sido poco provechosos. “Es difícil buscar mayor participación de la mujer en un emirato musulmán y con problemas de violación a los derechos humanos de ellas. Debían haber buscado otro tema de vinculación”, sentenció.
Pero el oficialismo insiste en que la agenda de Rivadeneira no ha sido inútil. “Emiratos Árabes tiene una presidenta mujer en el Parlamento, que es la única en esa región”, dijo Gina Godoy, de PAIS.