
Lo urbano, con rostro de mujer
Sus propuestas musicales inundan ya el Viejo Continente. Todas ellas tienen el mismo objetivo: conquistar el mercado latino.
Comparten irreverencia, pues dentro de una industria en la que aún no está del todo bien visto que las mujeres canten canciones con letras explícitas, esta característica se vuelve como un arma de defensa.
Estos rostros son los de una nueva generación de artistas que han crecido rodeadas de prejuicios dentro de la música, pero ahora las fronteras lingüísticas les quedan cortas. Se han propagado a través de Internet y tras el boom internacional de Rosalía, se les ha abierto una puerta que no piensan dejarla cerrar.
Los géneros musicales de cada una son distintos, todos derivados del sonido callejero urbano, pero con tintes de trap estadounidense, reguetón caribeño y dancehall jamaicano. Al ser representaciones femeninas de este ritmo tan odiado y amado, reciben las más ‘hirientes’ críticas, pero a la vez acumulan millones de reproducciones por sus videos.
Bad Gyal
Alba Farelo (22) es su nombre verdadero. La española descubrió a través de Internet el sonido jamaiquino que hoy canta: un reggae actualizado y más bailable.
Su primer video en superar un millón de reproducciones en YouTube fue Pai, una versión de Rihanna cantada en catalán. Desde ese entonces su carrera empezó a subir y la llevó a hacer conciertos en Estados Unidos.
Es cierto que muchos la acusan de interpretar letras machistas, pero a ella poco o nada le importa. Su estilo le permitió saltar de su trabajo en una panadería en su pueblo natal a anunciar, a finales de abril, su fichaje por el sello americano Interscope, el mismo que descubrió a artistas como Lady Gaga y Eminem. Santa María es su último sencillo que, en dos meses, ya superó los nueve millones de visitas en YouTube.
Ms. Nina
La argentina Jorgelina Andrea del Valle (29) lo está dando todo. Nunca pensó dedicarse a la música, pero empezó grabando con amigos por hobbie y hoy ofrece shows por toda España.
Y ante las críticas que genera este ritmo, tilda a la mayoría de gente como “hipócrita”, porque primero se asusta y luego no tiene problema en bailar los éxitos de Daddy Yankee.
De pequeña escuchó muchos ritmos, sin embargo decidió irse por el reguetón con letras muy sexis que es lo hoy de moda. Tajante, asegura no verse a los 50 cantando este género, pero hoy lo disfruta.
Albany
La depresión llevó a Alba Casas (22) a refugiarse en la música. Sus principios fueron muy difusos, no tenía un sonido definido, pero con el tiempo todo se fue esclareciendo.
Hace unos meses abandonó sus estudios en maquillaje para dedicarse de lleno al canto. “La escena urbana en España está en total crecimiento”, aseguró hace poco en una entrevista. Así como sus compañeras, no piensa desaprovechar la oportunidad que otros han sembrado, pero denuncia que siguen triunfando los de siempre y luchará para que no sea más así.
Deva
Después de una faceta con el alias D’Valentina, en la que lanzó sus primeros temas y se convirtió en fenómeno viral de YouTube con Nothing’s forever, Checks y Vibes, tomó su nombre real, Deva Josehp (19), para convertirse en una de las artistas urbanas más jóvenes de la escena. Se inclina por el ‘rhythm and blues’ con influencias del trap.
Pero su actividad musical no la separan de sus estudios, y está cursando el segundo de bachillerato.
Flaca
Nació en Argentina, vive en Madrid hace poco más de once años y hace tres inició su carrera de DJ de reguetón. Sofía Conti (25), más conocida como Flaca, ha pasado por festivales como Primavera Sound o las sesiones en vivo de Boiler Room.
Ha sabido ganarse su espacio y, como ha venido trabajándolo, reconoce que aún el género se sigue asociando como una cosa de “pobres”. Es parte del colectivo español Chica, que apoya al talento femenino. Entiende a la música como parte del activismo social.
En una entrevista con el portal Neo2, confesó que entre sus planes a corto plazo está centrarse a producir música y colaborar con otros artistas. A largo plazo, “hacerme rica con el reguetón para poder seguir estudiando e ir a ver a mi familia”.