El pacto etico

Ética es el conjunto de normas morales que rigen la conducta de la persona en cualquier ámbito de la vida.

Pacto es el acuerdo entre dos o más partes que se comprometen a cumplir lo estipulado.

La moral es relativa a las acciones de las personas en su obrar, en relación con el bien o el mal y en función de su vida individual, y sobre todo, colectiva.

Cuando un candidato hace su plataforma de campaña fundamentado en la lucha contra la corrupción, obteniendo el voto popular a base de tal ofrecimiento, se genera un pacto ético entre el pueblo y el político electo; mas, si este ya en funciones de gobierno incumple la promesa, rompe el pacto, alejando su accionar de todo principio ético.

Cuando el Legislativo crea leyes en favor de un modelo político o de un político en particular y no en favor de los intereses generales, rompe los principios de justicia, universalidad, generalidad, abstracción e impersonalidad de la ley, rompiendo asimismo el pacto ético adquirido con quienes los eligieron como sus representantes.

Promocionarse en campaña como adalid en la defensa de los derechos y libertades, y luego crear un andamiaje jurídico que, directa o indirectamente, genera impunidad y/o represión, por cuanto los organismos de control y justicia se encuentran bajo la batuta del poder Ejecutivo, el cual con su sola voluntad, como circo romano, decide la permanencia o enjuiciamiento de los funcionarios que hayan transgredido la confianza del Ejecutivo, no hayan defendido los intereses partidistas, o no hayan seguido los lineamientos del modelo político impuesto, sobreponiéndolos, por tanto, al interés general, se rompe también todo principio ético.

Bajo tales circunstancias, cabe preguntarse: ¿en estos últimos años de gobierno, han primado los principios éticos?

El pacto ético que los ecuatorianos requerimos de los políticos es que se inadmita la participación en elecciones populares o cargos públicos, a quienes priorizaron los intereses políticos partidistas por sobre el interés general del pueblo ecuatoriano. Ese debería ser el pacto ético.

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