Diligencia. Ricardo Rivera, tío de Jorge Glas, compareció a la audiencia desde el Centro Regional de Guayas.

Odebrecht: la inocencia de Glas se debate en la Corte

Es uno de 6 sentenciados que presentaron casación al fallo. Insisten en la nulidad de la condena.

Ricardo Rivera siguió atento la audiencia de casación que se desarrolló ayer en el octavo piso de la Corte Nacional de Justicia. Lo hizo a través de videoconferencia desde el Centro de Rehabilitación Regional de Guayas.

Lucía una camisa anaranjada, uniforme asignado a los privados de la libertad de las cárceles del país y un pantalón oscuro. Apareció en una pantalla en la parte izquierda de la sala de audiencias.

Sentado, de pie, apoyado en una mesa, con las manos en las mejillas, después con las manos en la cabeza. Rivera se acomodó de varias formas para seguir la diligencia, la última instancia antes que la condena a seis años de cárcel quede ejecutoriada.

El tribunal, presidido por la jueza Daniella Camacho, dedicó las primeras tres horas a escuchar los alegatos de los defensores de los solicitantes. Aunque la jueza Camacho concedió 15 minutos a cada defensor, no faltó quien se tomó media hora y 40 minutos para exponer las supuestas violaciones registradas en la sentencia.

Rivera es uno de seis sentenciados que presentó recurso de casación con el que buscó la anulación de la condena de seis años de cárcel por asociación ilícita en la trama de sobornos de Odebrecht y la ratificación de su inocencia.

Con él recurrieron Jorge Glas, su sobrino y exvicepresidente también condenado a seis años y actualmente preso en la cárcel de Cotopaxi. Glas no compareció ni personalmente ni por videoconferencia. Quienes sí acudieron a la Corte fueron simpatizantes, asambleístas correístas, Pierina Correa, hermana del expresidente Rafael Correa, entre otros.

En los exteriores de la Corte, un medio centenar de correístas proclamó la inocencia del exvicepresidente, a quien la Fiscalía también investigó por presunto peculado en el caso Singue y por cohecho en Sobornos 2012-2016, cuya instrucción fiscal se cerró el domingo.

Además de Rivera y Glas, buscaron que la condena quede sin efecto Képler Verduga, Carlos Villamarín, Ramiro Carrillo y Édgar Arias. Sus defensores alegaron violaciones al debido proceso.

María Moreira, defensora de Verduga, reiteró, entre otras cosas, que el tribunal no hizo un análisis de la favorabilidad o circunstancias atenuantes para su cliente, hubo una indebida aplicación de la ley y tampoco se determinó cuál fue la afectación al patrimonio estatal.

Wilson Velástegui, abogado de Carrillo, habló de error en la aplicación de dos normas distintas, no se dijo cómo usó su poder como funcionario en procura de fines ilícitos y que, si es que su cliente hubiese merecido una sanción, esta debió ser dosificada.

Aníbal Quinde, abogado de Rivera, alegó falta de motivación, indebida aplicación del artículo 42 del Código Penal derogado. Precisó que el autor tiene que ver con el delito y el cómplice con los actos.

Al haberse calificado a Rivera como el intermediario de los supuestos dineros que se habrían entregado a Glas, debía ser cómplice, aclaró Quinde.

Marcelo Ron, abogado de Cabrera, precisó que su cliente no tenía conocimiento de lo que hacían los funcionarios ni lo que Odebrecht hacía para conseguir los contratos.

Para Juan Carlos Quintana, abogado de Villamarín, la sentencia es incongruente, contradictoria y ambigua.

Glas tuvo defensa a dos manos. Eduardo Franco y Harrison Salcedo hablaron también de la indebida aplicación de la ley, que la sentencia es una aberración jurídica que avergüenza y pidieron se ratifique la inocencia del exfuncionario.

César Montúfar, acusador particular en contra de Glas, aclaró que como víctima no reclama ninguna reparación para él, sino para el Estado.

Por la tarde, Paulina Garcés, delegada de la Fiscalía, especificó que el argumento de la aplicación de la pena más beneficiosa para los procesados no tiene fundamento. Además, añadió que los abogados no hicieron cálculos porque si se aplicaba el Código Orgánico Integral Penal (COIP), con el agravante del un tercio, les subiría la pena actual. Cerca de las 17:00, la diligencia se suspendió. Habrá nueva convocatoria para la resolución.