Es importante la credibilidad en los funcionarios públicos, la confianza en ellos, ese hilo mutuo de aceptación que se genera y permite lograr la aceptación de ideas, propuestas y justificaciones, incluso en los casos en los que se requiere sacrificio personal del interlocutor.

El reciente ministro Juan Fernando Velasco, cantante y compositor, ha manifestado que esta cartera del Estado es “compleja y complicada”, que atiende más de 50 instituciones, pero que tiene mucho entusiasmo, aunque lamentó el estado de austeridad que atraviesa el país.

Su responsabilidad será apegada a la política de Cultura, es decir, la función específica del nuevo ministro es hacer cumplir lo que dice la ley, aplicar los incentivos económicos a corto y largo plazo, de tal manera que se regularice y visibilice todo el sector cultural. Si no hay recursos económicos es imposible sostener las instituciones y hacer obras.

Esperamos que se prioricen las asignaciones para todos los núcleos provinciales, para fortalecer el desarrollo de la lectura, danza, poesía, folclor, pintura, escultura, teatro, cine, entre otros. El juramento de cada ministro es de trabajar honestamente por el bienestar de la población en general, sin cometer graves faltas contra el Código de Ética, que deben honrar durante el desempeño de sus funciones. Señor ministro de Cultura, su obligación es garantizar el derecho de todos los ecuatorianos a tener acceso a la cultura y conservar nuestras raíces.

Lcdo. Robespierre Rivas R.