Neandertales

Estamos involucionando y no evolucionando. Queman grandes extensiones de bosques por todo el planeta, con un afán continuo por lucrar, otros para sobrevivir; considerando que la vida es solo la humana, destruyen el hábitat de otras especies y alteran nuestro destino. El ser humano parece que muy pronto se extinguirá, como lo hizo la especie Neandertal en la prehistoria. Nuestro comportamiento o las circunstancias que vivimos pueden cambiar nuestra estructura genética y es lo que está pasando con el ‘boom’ tecnológico, creando seres humanos digitales que no saben sobrevivir, dependientes de una pantalla. En la prehistoria los homínidos que vivían en los bosques inmigraron a las sabanas y se volvieron carnívoros, lo que llevó a tener menos comida para todos; así algunas especies se extinguieron. Tiene mucha relación con lo que estamos viviendo hoy en día, donde grupos humanos se dedican a quemar grandes extensiones de la Amazonía para seguir aumentando los cultivos transgénicos y los hatos ganaderos. Más gente, menos comida. ¿Será nuestro fin? Las grandes masas humanas en movimiento cruzando fronteras buscando una mejor vida, nómadas, y los sedentarios, que dependen de la tecnología para tomar decisiones, nuestras nuevas herramientas de trabajo y pensamiento. Se supone que tenemos otro grupo humano que nos gobierna y que toma las mejores decisiones para nuestro beneficio, a veces. En el caso de Brasil y Bolivia no lo hicieron. Somos tan frágiles. Desaparecemos por desastres naturales y justamente por esa razón debemos cuidar nuestro hábitat y desarrollar más nuestro instinto de supervivencia. Los neandertales viajaban dependiendo de las estaciones y de las migraciones de los animales, vivían en cuevas y sus actividades eran repetitivas. Los ‘homo sapiens’ eran diferentes, cosían carpas, ropa y sus herramientas eran mucho más sofisticadas. Pero lo que sí tenían en común era el arte, que era parte de su identidad. Su función, unir diferentes grupos. Dos especies distintas, una sola humana y sobresalió, dejando a la otra en extinción. Nuestra involución nos acercará más a la especie Neandertal siendo limitados, egoístas, inmediatistas y creyéndonos cada día más que somos dioses.