El merito y la meritocracia, dos terminos que no encajan
La primera pregunta es: ¿Qué significa mérito? Es la acción digna de premio o castigo. Cualidades de una persona que la hacen digna de aprecio o alabanza. Valor, en especial el digno de reconocimiento.
En ninguna de estas acepciones se puede observar que se mencione, ni de lejos, que sea un mérito el profesar la misma ideología de otra persona, tampoco de tener afinidades con esa ideología, y, peor el que sea la amistad o la sumisión una de las características del mérito.
Bien, una vez definido el término mérito, vamos a la meritocracia: “La meritocracia es un sistema basado en el mérito. Esto es, las posiciones jerarquizadas son conquistadas con base al merecimiento, en virtud, del talento, educación, competencia o aptitud específica para un determinado puesto de trabajo.
Durante muchos años, y en especial en la década perdida, presenciamos con impavidez y estupor, nombramientos de personas que asumían responsabilidades para las que se requería de conocimientos especializados, sin tener el mérito correspondiente, y lo que es peor, sin tener los conocimientos apropiados a esas responsabilidades.
Aún lo estamos viendo en este gobierno: no se respeta el conocimiento profesional ni la trayectoria en las designaciones. Esto es algo muy peligroso para los logros de un gobierno, y ya lo hemos vivido lamentablemente.
Ing. José M. Jalil Haas