Escena. Freddy Luna muestra a EXPRESO el sitio en el que la tierra cedió, producto de las intensas lluvias.

Las lluvias debilitan un tramo del malecon de Mucho Lote 2

Las primeras lluvias del año llegaron acompañadas de preocupaciones para los moradores de las urbanizaciones que están ubicadas en Mucho Lote 2, en el norte de Guayaquil.Guayaquil

Las primeras lluvias del año llegaron acompañadas de preocupaciones para los moradores de las urbanizaciones que están ubicadas en Mucho Lote 2, en el norte de Guayaquil. Especialmente las que colindan con el río Daule.

Luego del intenso aguacero que soportó la ciudad el primer fin de semana de febrero, un gran tramo de tierra del malecón del sector cedió hacia el afluente, provocando también la caída de árboles y rocas que sirven de soporte a una vereda.

“Es la primera vez que se produce un socavón y eso que en años anteriores ha llovido más fuerte. Estamos preocupados porque por aquí pasan muchas personas, especialmente niños”, dice Freddy Luna, quien reside desde hace un año frente al tramo que cayó, en la urbanización Paraíso del Río 1.

Para Luna y para la mayoría de sus vecinos, el miedo más grande es que la tierra, que aparentemente está débil, siga cayendo al río y termine por llevarse -con las próximas lluvias- parte de la vereda con la que limita.

“Aquí no hay ni barandas. Y así como se cayeron esos grandes árboles puede derrumbarse el camino. Es muy inseguro para los que utilizan a diario este lugar”, precisa Diana Lazo, otra moradora.

Todos coinciden en que cuando compraron sus viviendas, hace aproximadamente cuatro años, se les informó que a lo largo de las riberas el Municipio iba a construir un parque lineal. Ahora solicitan que se cumpla esa promesa.

“A nosotros nos vendieron un malecón y un parque y eso también está detallado en el plano oficial del sector. Sin embargo pasa el tiempo y no vemos que se construye nada. Creemos que esta es una razón suficiente para que inicien los trabajos”, menciona Otto Esparza, directivo de una de las ciudadelas.

Anabel Romero, otra vecina, dice que frente a la urbanización Alameda del Río la vereda ya está cuarteada, lo que, a su criterio, es una señal más de que ese tramo se puede derrumbar en cualquier momento.

Tránsito y más obras

Cuatro cartas con 15 pedidos específicos enviaron el pasado 16 de febrero los representantes de las urbanizaciones al Municipio. Entre las más importantes se encuentran la construcción de un ingreso a la zona, un retorno más cercano, instalación de señalética, cámaras de videovigilancia, y la construcción de zonas de equipamiento urbano que constan en el plano.