“No vendamos lo que nos regalan”

L o que recibamos gratis, así debemos darlo (Mateo 10:8); esto se aplica no solo a lo espiritual o religioso sino también a la vida diaria. Hay personas, señor Director, que reciben regalos del exterior o en estas fechas y, lo que no les gusta o no les queda, lo venden.

Si acogemos el referido concepto cristiano, no debemos hacer eso ya que es interrumpir o cortar la cadena de favores o las bendiciones de Dios, que son gratuitas; démoslos a quienes realmente los disfruten y al dador original digámosle la verdad y, si lo toma a mal, que quede en él, pero habremos actuado de acuerdo a nuestra conciencia y a la voluntad de Dios.

Miguel Ulloa Paredes