Rito. El personaje de la ‘Catrina’ fue representado por Maya Franco.

Kichwas mexicanos y ecuatorianos muestran sus rituales

Caminando por las tumbas del Cementerio Indígena ‘Unorico Samashunchi’ de la ciudad de Otavalo, en la provincia de Imbabura, con su traje oscuro y rostro pintado llamaba la atención de las personas.

Caminando por las tumbas del Cementerio Indígena ‘Unorico Samashunchi’ de la ciudad de Otavalo, en la provincia de Imbabura, con su traje oscuro y rostro pintado llamaba la atención de las personas.

Era la ‘Catrina”, un personaje mexicano que demuestra que no importa la clase social a la que pertenezca la persona, pues la muerte llegará y con el tiempo terminará siendo una calavera.

Maya Franco, quien trabaja en la embajada de México, fue la encargada de representar a la ‘Catrina’ (antes llamada la ‘Calavera Garbancera’). Esta fue creada por el caricaturista José Guadalupe Posada y bautizada por el muralista Diego Rivera.

Esa invención que nació como una crítica a los mexicanos pobres que trataban de aparentar un estilo de vida diferente, se volvió una tradición que se celebra de manera especial en el Día de Difuntos.

Maya comenta que en ese país se cree que el 1 y 2 de noviembre son los únicos días en los que el difunto tiene permiso para regresar con los vivos. La gente los espera con agua, incienso y con la comida que les gustaba, para celebrar el hecho de poder reencontrarse.

La ‘Catrina’ es una calavera vestida con ropa de gala. Define a la mujer y hombre elegantes con el estilo de la aristocracia de fines del siglo XIX y principios del XX.

Usa sombrero, diadema de flores, guantes y un vestido. Simula ser rica, pero demuestra que al final todas las personas van a la tumba, sin importar a qué clase social pertenezca.

En el país centroamericano la muerte es alegría y la tradición del personaje cada año se fortalece. “La ‘Catrina’ representa a una ‘pelucona’, es alguien que tiene dinero. Esa tradición en el 2008 fue nombrada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad”. Maya Franco asegura que no tiene nada que ver con la Santa Muerte, una figura que personifica a la muerte y al culto. (F) MR