Referencial. El segundo en la organización de Guacho era alias Cachi. Entre otras actividades él hacía el contacto con los narcotraficantes que ingresan al área de injerencia a comprar droga.

Guacho custodiaba un submarino con droga

Audiencia. El lunes a las 09:00 en Quinindé será la audiencia preparatoria de juicio para Guacho y otros por terrorismo.

La Fiscalía sigue en su tarea de armar el ‘rompecabezas’ que representa el Frente Oliver Sinisterra, responsable de los atentados terroristas en la frontera norte.

Las versiones incorporadas al expediente, a las que accedió EXPRESO, coinciden en que Guacho mantiene en Ecuador el liderazgo de un grupo de, al menos, de 71 personas armadas en el sector de la parroquia Mataje, sin contar con milicianos y narcotraficantes que lo apoyan. Un centenar ha sido detenido en Ecuador y Colombia.

Los testimonios lo ubican como el coordinador de envíos de coca. Un desmovilizado que estuvo casi siete años en la estructura de la Columna Móvil Daniel Aldana cuenta que tuvo la oportunidad de acogerse al proceso de paz o seguir de civil. Decidió seguir operando de civil y conoció a Guacho quien llevaba cuatro meses en esas actividades. Abandonó el grupo porque creía que le querían matar. Tiempo después el desmovilizado encontró a Guacho en Mataje y le propuso trabajar con él. Afirma que la idea era solo trabajar con narcotráfico. Le dijo que sí.

Asegura que el punto de encuentro era en Mataje, “en una casa que tenía él, muy bonita en tierra ecuatoriana, en pueblo Nuevo Mataje”. Al principio solo cuidaban el submarino en el que se enviaba la coca a México. Eran unos 30 hombres. Luego Guacho se asoció con alias Cachi y fortalecieron el grupo con más dinero. “Y con la ayuda de un sargento del Ejército, que vendía armas, se empezó a reclutar más gente” y así fue que la actividad se expandió a la zona del río Mira.

Otro excolaborador describió que en las reuniones de Guacho con los narcotraficantes “se observaban los maletines llenos de plata, entre dólares y dinero en pesos, las maletas eran guardadas y custodiadas por 10 a 15 hombres”.

Clientes de Guacho habrían sido narcotraficantes identificados como “Polín, Tito, El Mono Castañeda, Carlos” y otros.

Pero Guacho no solo se dedica al negocio de la droga. Aunque no sabe a quién compraba afirma que el armamento y explosivos iban desde el Ecuador.

“Lo que sí sé, es que armas es lo que más hay porque todo el que llega nuevo de una vez le asigna su dotación. Las armas se guardan en una finca en Puerto Rico, en Mataje, en la Mina y en Candelillas. La gente que se convierte en colaboradora de Guacho proviene de caseríos o veredas en las que es conocido. Muchos van a pedirle trabajo o solo quieren andar con él, concluye.

El próximo 17 de agosto, a las 09:30, se conocerá a cuántas personas acusa la Fiscalía por la explosión del destacamento policial de San Lorenzo, en Esmeraldas, ocurrida el 27 de enero. Hay 28 hombres y mujeres, procesados por delincuencia organizada y terrorismo. Algunos también fueron llamados a juicio por tráfico de armas, de precursores, de drogas y por terrorismo.

A la cabeza del grupo está Walter Arízala, alias Guacho. La agrupación es responsable de al menos 10 atentados en San Lorenzo, Mataje, Borbón y El Pan que cobraron la vida de nueve personas: cuatro militares, tres periodistas de El Comercio, Óscar Villacís y Katty Velasco.

Contacto

El segundo en la organización de Guacho era alias Cachi. Entre otras actividades él hacía el contacto con los narcotraficantes que ingresan al área de injerencia a comprar droga. Organiza a los campesinos para evitar la erradicación de la coca.

Movilización

El desmovilizado cuenta que alias Cachi se moviliza en una camioneta Nissan roja sin placas. Lo acompañan seis personas entre ellos tres mujeres con armas de largo alcance. Se desplazan por las veredas Tandil y Puerto Rico. Tiene dos casas en Puerto Rico y Brisas de Mataje.

Expediente

El expediente por la explosión del destacamento policial de San Lorenzo tiene 30 carpetas con partes policiales, chats de conversaciones entre los sospechosos, peritajes, versiones sin juramento, asistencias penales internacionales, entre otros.