Muestra. Con el GPS se logra ubicar cada nido de tortugas gigantes.

GPS para proteger los nidos de tortugas

Guardaparques de la Dirección del Parque Nacional Galápagos (DPNG) y del Ministerio del Ambiente han logrado proteger unos 313 nidos de tortugas terrestres, en diferentes zonas de anidación de la isla Santa Cruz, tanto de la especie Chelonoidis porteri

Guardaparques de la Dirección del Parque Nacional Galápagos (DPNG) y del Ministerio del Ambiente han logrado proteger unos 313 nidos de tortugas terrestres, en diferentes zonas de anidación de la isla Santa Cruz, tanto de la especie Chelonoidis porteri (zona este) como de la Chelonoidis donfaustoi (zona oeste).

La tarea comenzó desde julio y la intensión es identificar con un dispositivo de posicionamiento global (GPS) la ubicación de cada nido colocado por las tortugas gigantes durante la temporada de anidación, para así protegerlos con cercas de malla de los principales depredadores como cerdos, que podrían dañarlos, indicó la DPNG.

Durante estos tres meses, los guardaparques han recorrido hasta por terrenos escabrosos, para llegar a las zonas de anidación como: La Torta, La Caseta, El Peligro, Cerro Gallina y El Fatal, donde habita la nueva especie de tortuga identificada en 2015.

En esos sitios, los expertos distinguen la tierra que dista de los demás espacios. Al golpear sobre ella, un “vacío” les confirma la existencia de un nido.

Las tortugas gigantes, cuya morfología es tipo cúpula, como las de Santa Cruz, pueden colocar entre 16 y 18 huevos. El éxito de eclosión, en estado natural, dependerá de las condiciones climatológicas presentes durante la temporada, alcanzando un 10 % en un área sin depredadores; mientras que en cautiverio, en las incubadoras artificiales de la DPNG, se puede alcanzar hasta el 75 %.

También se realizan otros controles de especie introducidos, alrededor de estas zonas, especialmente hormigas que podrían penetrar al interior del nido y arruinar los huevos.

Los guardaparques también están limpiando los senderos de acceso a los sitios de anidación, para que se facilite llegar hasta ellos cuando empiece el proceso de liberación de tortuguitas eclosionadas, a partir de la última semana de diciembre.

Desde mediados de noviembre, los huevos de los nidos de El Fatal serán extraídos de su estado natural en la última fase de incubación y serán trasladados al centro de crianza de la isla para finalizar su proceso de incubación y ser criados en cautiverio hasta los cinco años aproximadamente.

Con esas acciones, desde el Centro de Crianza de Santa Cruz se ha logrado repoblar las islas con más de 5.000 tortugas gigantes.