Fueron destituidos y serán investigados por el supuesto uso indebido de bienes incautados. Nueve funcionarios del Servicio de Gestión Inmobiliaria del Sector Público (Inmobiliar) están relacionados con la fiesta que se habría realizado en una vivienda incautada a Álex Bravo, exgerente de Petroecuador.

El incidente ocurrió la noche del miércoles en Esmeraldas. La música a alto volumen, los sonidos extraños y mucho ruido alertaron a los vecinos del barrio La Concordia, un sector residencial exclusivo, en el sur de la ciudad.

Provenía de una vivienda lujosa, con cerramiento de cemento y mallas eléctricas, que pertenece a Bravo. Él está detenido en Quito acusado por cohecho y enriquecimiento ilícito. Fueron sus familiares quienes descubrieron la fiesta.

La policía deslindó responsabilidad. El coronel Pablo Cerda, jefe distrital, aclaró que la casa está bajo la custodia de Inmobiliar. En la vivienda, según dijo, se encontró a siete personas, entre ellas dos mujeres.

El fiscal Diego Pérez está a cargo de la investigación. Dijo que se hará una inspección de los bienes inventariados que había al interior del domicilio.